Hace unos años que los relojes, como casi todo lo que nos rodea, se volvieron inteligentes. Dejaron de ser dispositivos monotarea para dar el salto a múltiples y prácticas funciones. Controlar e informar del tiempo se convirtió en algo casi accesorio. Comenzaron a florecer todo tipo de marcas y modelos en el mercado, la mayor diferencia entre ellos solía estar en la calidad de la pantalla, la duración de la batería y la cantidad de variables corporales que eran capaces de medir. Amazfit comenzó su andadura en 2015 y dos años después lanzaron al mercado su primer reloj inteligente. En 2021 acaban de renovar la gama de relojes con la llegada de los modelos GTR 3 y GTS 3. Hemos podido poner personalmente a prueba la nueva actualización del Amazfit GTR 3.
Lo primero que destaca de los modelos recién salidos a la venta son sus líneas elegantes y estilizadas. Su esfera redondeada, con cuerpo de aluminio, puede presumir de un gran gusto en su diseño. La pantalla es grande y con un sencillo acceso a cada una de las aplicaciones a la que queramos acceder. Una de las cosas que más me ha sorprendido ha sido su brillo.
Incluso con la intensidad más baja la pantalla con tecnología AMOLED sigue siendo muy luminosa y con una legibilidad absoluta. Movernos entre aplicaciones puede hacerse con los dedos, de forma táctil o a través de su botón superior derecho donde se ubica una corona que podemos girar para desplazarnos entre ellas. Su uso es intuitivo y sencillo. Otro punto diferenciador es la duración de su batería. Hasta 21 días con una sola carga.
El Amazfit GTR 3 está centrado en proporcionarnos datos de todo tipo, por eso sus opciones para calibrar y medir el deporte que decidamos hacer es casi infinito. 150 modos deportivos integrados, las opciones son inabarcables, de hecho hasta podemos seleccionar realizar deportes electrónicos. Entre las múltiples mediciones que realiza, posee un modo muy cómodo en el que nos proporciona cuatro datos con solo pulsar un botón.
Una pulsación y sabremos nuestra cantidad de oxígeno en sangre, la frecuencia cardiaca, el nivel de estrés y el número de respiraciones que hemos hecho en un minuto. En el móvil todo se gestiona desde su aplicación Zepp, desde ella podemos gestionar las notificaciones que recibimos en el reloj, sonidos, esferas… Alexa, el asistente de voz que integran los dispositivos de Amazon también está incorporada en este reloj. Disponible incluso sin conexión.
Cuando dormimos el reloj sigue cuidando de nosotros. Se encarga de proporcionarnos información sobre la calidad de nuestro sueño, controlando las etapas del sueño, las siestas y las etapas de respiración mientras descansamos. El Amazfit GTR 3 está disponible en dos colores, Moonlight grey y Thunderbolt Black. Su precio es de 149 euros.
Si hablar por teléfono a través del reloj sin necesidad de usar nuestro móvil es importante para nuestra vida diaria podemos adquirir el modelo superior, el Amazfit GTR 3 Pro que incluye esa posibilidad por cincuenta euros más. En definitiva una importante actualización de esta marca de relojes a un precio muy competitivo. Un reloj para el día a día aunque el deporte no sea el centro de nuestra actividad rutinaria.
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