Mayo, el mes de las romerías

Mayo trae mucho más que flores y buen tiempo. Es un mes de tradiciones, de peregrinaciones, de romerías. Un mes en el que se suceden muchos eventos que, además de adentrarnos en la historia y nuestra cultura, dará la oportunidad al viajero de conocer lugares, sin duda, con encanto. Hoy destacaremos algunas de las romerías más destacadas de nuestro país, con permiso de la más multitudinaria y especial, la del Rocío, a la que dedicaremos un post la semana que viene.

En Lepe es en honor de la Virgen Bella. Allá por el siglo XV unos marineros encontraron un cajón flotando en la mar. Cuándo se abrió, encontraron dentro una Virgen y dijeron “qué bella es” y con este nombre se quedó y comenzaron las peregrinaciones que acabaron convirtiéndose en multitudinaria romería. El 2º domingo de mayo, de madrugada, la Virgen Bella es llevada en procesión, acompañada de caballistas y romeros a pie, hasta la ermita (a 4 km), entre continuos ‘Vivas’ a la Virgen y cantos de sevillanas. Entre las coplas, la más popular es la que repiten una y otra vez: “Yo no la cambio por ná”.

En Moguer es Nuestra Señora de Montemayor, igualita a la del Rocío (con «salto» y todo) pero sin el millón de personas. En el siglo VIII un sacerdote, por miedo a los moros, escondió la imagen dentro de una encina donde fue hallada por un pastor muchos años después. Trasladada la imagen a Moguer, ésta siempre volvía a la encina donde se acabó levantando una ermita. El sábado (día 9) vienen por todos los caminos hasta la ermita: más de un millar de caballos, decenas de carretas y miles de romeros a pie.

A mediodía es la recepción de las hermandades. El domingo es el día mas emocionante. El “salto”, a por la Virgen se hace a media tarde cuando alguien se lanza a coger la imagen y todos le siguen. Después vendrá la procesión con la imagen de a hombros de sus costaleros y entre el fervor de sus fieles.

En Bonares se celebra la llamada Cruz del Romero. Hay doce cruces, una por cada hermandad, adornadas con telas y dibujos realizados con puntillas, alfileres y abalorios. La víspera se va a caballo desde la capilla de la Cruz de los Romeros hasta el paraje El Corchito y el domingo (el tercero del mes) es el recorrido con todas las cruces.

En Cartaya el segundo domingo se lleva la imagen de San Isidro desde su ermita al templo. Pero los días fuertes de la romería son del 28 al 31 hasta la pradera (a 4 kms) con todos los estandartes.

En La Palma del Condado la fiesta se conoce como El Romerito y consiste en la ofrenda de romero a la Santa Cruz con carrozas engalanadas y jinetes ataviados a la andaluza. Dos hermandades se reparten las devociones: las de la calle Sevilla (el día 9 y es muy antigua ya que se celebraba en el siglo XIX) y la de calle Cabo (el día 30).

En Rociana el segundo domingo se celebra la Santa Cruz de Arriba. La salida es desde la ermita acompañada por caballistas y carros. Salen todas las cruces de las difrentes calles y a última hora será la entrada del romerito que recorrerá el pueblo hasta su capilla. La Cruz de Arriba, de madera y adornada de flores silvestres, es llevada en carro tirada por bueyes. Cada Cruz hace una reverencia a las demas conocida como las cabezás y cada hermandad baja la parte delantera del paso.