La irresistible tentación de la pieza única

Estamos en Authentic PreOwned, en el 461 de West Broadway de Nueva York y tras el cristal se exponen un libro inmenso con fotografías de Helmut Newton sobre un atril plateado, una maleta de Louis Vuitton, un mono de aviador de cuero gastado, un pequeño bolso de Celine y un telescopio. ¿Qué tiene en común semejante composición? Todos son artículos de lujo de segunda mano. Y todos podrían contar una historia. ¿Preparados para usar la máquina del tiempo?

En este elegante local de Tribeca y en otro ubicado en Soho, el matrimonio formado por Bobby Arang y Sharon Nazarzadeh no solo vende moda, joyería, accesorios, ‘vintage’ y decoración exclusivos a un precio razonable. También ofrece al visitante la oportunidad única de perderse en un espacio que destila el lujo y la belleza de un tiempo que no volverá.

Pero no resultará fácil adentrarse en sus locales. Allá donde el visitante posa la vista se topa con una pieza única que admirar. Como en una vitrina art deco con bolsos divinos o en ese antiguo armario de boticario donde se exhiben brazaletes de Tiffany and Co, carteras de Prada y Dior, relojes Omega y Hermes…

Pero también es inevitable alzar los ojos para deleitarse con lámparas singulares de esferas plateadas, globos aerostáticos multicolor y fotografías de Marilyn Monroe o Muhammad Ali con los Beatles a sus pies allá por 1964. Irresistible para quien disfrute redecorando su casa con un toque distinguido o quien sueñe con lucir una joya hecha a mano y atemporal de una gran firma que nadie más, seguro, lleva en su ciudad.

Authentic PreOwned garantiza la autenticidad del género que depositan en sus tiendas los propietarios de estos tesoros. En algunos casos, estos clásicos pueden haber viajado durante décadas y por muchos lugares del mundo, como un baúl de Louis Vuitton de los años treinta, el artículo favorito de Sharon Nazarzadeh, que está rebajado a 7.500 dólares. Pero tal vez le interese más un Rolex Vintage de los 60 ($2.950) o unas gafas Valentino ($185). Sin duda, en Authentic PreOwned puede encontrarlos.

Pero si no da con lo que busca, Authentic PreOwned se encarga también de localizar piezas exclusivas a la carta, como el caso de un coleccionista que ansiaba adquirir un juego de Backgammon de Louis Vuitton. El hallazgo se hizo esperar hasta un año, pero lo lograron. El cliente pagó 7.000 dólares por él.

Aunque el negocio abarca más que productos vintage o antigüedades. Authentic PreOwned apuesta por el ‘new contemporary made in USA’, comercializando artículos actuales de creadores especializados, como reproducciones de aeromodelismo con su encantador toque retro.

Junto con los clásicos bolsos de Chanel, cuya compra se ha convertido en una de las inversiones más certeras, su producto estrella son las bellísimas máquinas de escribir Smith Corona. Un artista se encarga de restaurarlas para ellos y convertirlas en obras de arte. Las doradas cuestan 1.500 dólares, y con baño de plata, 1.100.

Dada su especialización y la ubicación del negocio en Manhattan, por las tiendas Authentic PreOwned han pasado intérpretes como Robin Wright y el oscarizado Leonardo DiCaprio; el modisto Jean-Paul Gaultier, quien compró ropa o la mujer de Robert DeNiro, Grace Hightower, que se decantó por la decoración para su impresionante apartamento con vistas a Central Park y al río Hudson.

Pero entre sus clientes habituales hay mucho diseñador de interiores que encuentra en Authentic PreOwned esos artículos originales que hacen de hoteles y restaurantes lugares inolvidables. Uno de ellos del Stanley Group, en California, luce en su ambiente las diez lámparas de un barco de la II Guerra Mundial que se llevó un interiorista a 3.000 dólares la unidad.

Sin duda, el paseo en esta glamourosa máquina del tiempo en el corazón de Nueva York introduce la clave de todo shopping que se precie: el elemento sorpresa. Además, el personal de las tiendas probablemente recordará sus intereses, su compra y hasta su nombre si vuelve. En caso de que no pueda darse ese lujo, Authentic PreOwned también permite la ronda virtual en su web de venta. Como los productos, la tentación también está garantizada.

Artículo escrito por Susana Tejedor.