En venta la casa de Meghan Markle en Los Ángeles

Hace unos años la vida de Meghan Markle era muy distinta a la de ahora. Sus días tenían otro “enfoque” y sus preocupaciones y alegrías giraban en torno a otras “prioridades”, pero ya se sabe, la vida cambia y, con ella, los lugares donde residimos. La Duquesa de Sussex habita ahora Frogmore Cottage, una histórica cabaña construida en 1801, que pertenece (por supuesto) a la realeza británica. Debido a esto, Meghan ya no ocupa la que fuera su residencia en Los Ángeles: el 447 de la Avenida South Highland.

Ahora, la vivienda que ocupaba la actriz y bloguera en California está vacía, necesita un nuevo residente y… ¿Por qué no podrías ser tú? Esto, claro, si te atrae la idea de vivir muy cerca de la meca del cine (Hollywood) y a pocos minutos del Museo de Arte de Los Ángeles, en un barrio residencial muy tranquilo y acogedor. Si es así, prepárate, porque la vivienda está en el mercado y ha bajado de precio recientemente: ha pasado de los 1,80 millones de dólares (1,64 de euros), con los que apareció en agosto, a los 1,75 actualizados recientemente (18 de septiembre). Al cambio, unos 1,60 millones de euros.

Una lujosa vivienda situada en el barrio de Hancock Park

El vecindario se llama Hancock Park y se ubica en torno al parque que lleva el mismo nombre en Los Ángeles. Este apacible barrio también ha tenido otros ilustres vecinos como Antonio Banderas, Melanie Griffith, Natalie Cole o James Spader. El edificio es una construcción de dos plantas sobre un solar de 760 metros cuadrados aproximadamente, en los que se aposenta el inmueble con un total de 210 metros cuadrados construidos, así que espacio no te va a faltar para invitar a familiares y amigos, te lo aseguro.

La residencia fue construida en 1924, así que ya tiene sus años, lo cual, lejos de ser un hándicap, viene a ser un incentivo: vivir en una casa con historia es algo así como un premio. Posee un pequeño garaje cubierto donde estacionar dos vehículos, separado de la residencia principal. En la planta baja se accede directamente al salón principal, acompañado por el comedor al fondo, que da acceso al patio (mediante un porche) y a una alargada cocina, junto a ésta, un baño y la caja de escaleras, accesible también desde el salón, y que da a la sala de estar secundaria.

Una vivienda de estilo colonial construida en 1924

La planta alta posee cuatro hermosos dormitorios, dos con baño compartido y otro baño compartido, que da al pasillo y a una de las habitaciones. La vivienda ostenta numerosas ventanas, para aprovechar los generosos días de luz de Los Ángeles, tiene una buena cocina, con electrodomésticos de acero inoxidable, chimenea en el salón y tonalidades neutras en toda la vivienda. En el jardín, varias palmeras oriundas de la zona acompañan al mobiliario exterior y a un recortado césped.

El edificio tiene un marcado estilo colonial, muy extendido por las mejores viviendas de Los Ángeles. Un espectacular porche te espera a la entrada, con dos columnas Jónicas peraltadas por una base de ladrillo, la envolvente está compuesta por la tradicional superposición de tejas longitudinales de madera, de color blanco, en claro contraste del color negro de la carpintería y las rejas de metal exteriores. Protegiéndolo todo, una clásica cubierta a dos aguas, generosa en sus aleros.

Renueva la vivienda y adáptala a tu estilo y necesidades

Pero, como nuevo propietario de la residencia, necesitarás adaptarla para tu futura estadía, así que hemos recopilado unos cuantos consejos que, tal vez, te ayuden un poco: El primer consejo es el de conservar la esencia del edificio, es decir, su envolvente y características principales. Si la casa está así desde 1924, debería ser reconocible cuando llegue al 2134… Mantener el pavimento de madera parece una buena idea, la madera combinará con cualquier elemento nuevo, de cualquier estilo y diseño.

El segundo consejo es el de adaptar las instalaciones. Las energías renovables han llegado para quedarse, así que no tiene sentido desaprovechar su potencial, toca instalar placas fotovoltaicas que ayuden al consumo energético de la vivienda, revisar la instalación central de aire acondicionado y, si es preciso, sustituirla por una de mayor eficiencia, lámparas de bajo consumo, generación de agua caliente sanitaria por paneles solares, etc…

Adapta la decoración a tu estilo y consigue una casa moderna y acogedora

Tercer consejo. Hay que examinar la envolvente del edificio y ver si cuenta con suficiente grado de protección frente al frío o el calor. Para conseguirlo, se puede optar por sustituir las ventanas por otras de mayor eficacia, de doble cámara, introduciendo elementos de obstrucción de los puentes térmicos (lugares de la fachada por los que puede escaparse el calor), u optar por adosar a los tabiques algún material aislante.

El cuarto es más radical: fuera el mobiliario. Puedes, por supuesto, escoger varios muebles que te hayan conquistado, pero tu nueva residencia debe parecerse a ti y a tu forma de vida. Para ayudarte en este camino lo ideal es contar con un profesional de la decoración, alguien ilustrado en estos menesteres, aunque, si tienes buen gusto y tiempo, será el mejor de los pasatiempos descubrir que elementos casan más contigo y tu nuevo hogar.

Ya que te pones con obras, piensa en el futuro y adapta la casa ante posibles problemas de movilidad

Quinto consejo: hay que reformar los baños y la cocina. Nada de intentar aprovechar los cuartos húmedos, necesitamos cuartos de baño prácticos y bellos, a ser posible, lavamanos, inodoros y bidets suspendidos y buenos platos de ducha, con alguna bañera en un baño concreto, por aquello de aprovechar un buen domingo dentro de una… La cocina, en este caso, se me antoja demasiado estrecha. Hay que buscar la forma de mejorarla. Se me ocurre sacrificar el cuarto de estar secundario y ubicarla allí, con una gran isla o una barra… ¿Qué opinas?

El sexto consejo es para nuestro futuro. Nunca podremos saber cuándo van a fallar nuestras fuerzas, si vamos a tener un percance que nos incapacite temporalmente u otra circunstancia que nos limite físicamente. Así que, en la medida de lo posible, debemos mejorar la accesibilidad del hogar. En este caso, buscaría la forma de instalar un pequeño montacargas que alcance a la planta alta, aunque tuviera que sacrificar una de las habitaciones. También pondría pequeñas rampas, una a la entrada de la vivienda, detrás de la fila de palmeras, y otra en la salida posterior, detrás del porche de acceso al jardín.

Por último, el séptimo consejo y, para mí, el más importante de todos: si tenemos espacio, y en la vivienda en la que residió Markle 2011 y 2013 (cuando estaba casada con Trevor Engelson) lo hay de sobra, debemos construir una piscina. Una buena piscina que nos ayude a soportar el verano. Y es que construir una vivienda sin piscina debería estar prohibido, al menos, en Los Ángeles.