Tesoros de la costa cantábrica para cuando volvamos a viajar
Hay miles de alojamientos que añadir a nuestra wish list de deseos viajeros para 2021 pero hoy queremos destacar dos.
En 2021 volveremos a viajar como lo hacíamos antes. Y quizás valoremos más aún la libertad y las posibilidades vitales que dan los nuevos destinos, los nuevos alojamientos, los nuevos lugares. Esos que nos acercan a sus gentes, a su gastronomía, a sus secretos. Esos que nos hacen crecer y ampliar nuestros portfolio de experiencias vitales. La costa cantábrica tiene infinidad de posibilidades para perderse, reconectar y cargar pilas con el rumor y el intenso azul de su mar. Hoy os hablaremos de dos casonas imponentes, especiales y responsables para desconectar o reconectar en Hondarribia y Noja.
Villa Magalean en Hondarribia
Una de sus poblaciones costeras más bonitas y encantadoras es Hondarribia, en Guipúzcoa. Un pueblo costero de colores marineros y un delicioso casco antiguo en el que el tiempo se detiene, literalmente, para que el viajero ponga su reloj a cero. Entre todas sus casonas destaca el hotel boutique Villa Magalean Hotel & Spa. Un hotel ecoturístico que sirve de amparo y regazo (de ahí su nombre en euskera) a quien lo visita ofreciéndole todas las garantías de seguridad contra el Covid.
Rodeado de naturaleza en un entorno privilegiado, este coqueto alojamiento es uno de esos deseos que añadir a nuestra lista de Año Nuevo. Además de prometer una estancia especial, Villa Magalean ayuda también a cuidar el medio ambiente. Paneles solares, limitación de uso de plásticos, gestión responsable de residuos, compromiso con productores y vida social local… todo en su gestión y funcionamiento es 100% compromiso y responsabilidad tal y como confirma su propietaria, Caroline Brousse.
Viajar en 2021 a la Casona del Carmen
Estos son también los valores de La Casona del Carmen, en Noja, un alojamiento especial en el que las mascotas son también muy bienvenidas. Esther y Miguel dirigen esta imponente casona rodeada de jardines y a escasos minutos del centro del pueblo y varios de los mejores arenales de la zona. La playa de Trengandín, la de Ris o los arenales de Joyel y Victoria son algunos de las joyas naturales que garantizan una estancia de diez.
Y no nos referimos solo a los viajeros sino también a sus acompañantes peludos. Y es que el hotel, dividido en apartamentos individuales, está especializado en la recepción y trato de perros. De hecho acaba de obtener el Premio Travel Guau al mejor establecimiento petfriendly de 2020. Un reconocimiento que se suma a su impecable trayectoria que nos hace añadirlo a nuestra wish list de hoteles que visitar en 2021… cuando volvamos a viajar.