La firma que fascina al matrimonio West-Kardashian
Sus sudaderas XXL son un must. Te presentamos la firma de lujo que ha enamorado ya a las celebrities más mediáticas del momento.
Al buscar información sobre Vetements en Google algunos de los resultados que aparecen la describen como “la fuerza del diseño underground que revoluciona las reglas de la moda” o “la firma que fascina al matrimonio West-Kardashian”. Y no es de extrañar, cuando el equipo que la forma está compuesto por antiguos trabajadores de Margiela y Louis Vuitton. Por no hablar de Demna Gvasalia, la cara visible de la firma y a partir de ahora, sustituto de Wang y nuevo director creativo de Balenciaga.
Vetements (o ‘prenda’ en francés) era hasta hace bien poco una etiqueta misteriosa creada por un colectivo anónimo que se ha convertido en un referente con apena tres colecciones. Los patrones reconocibles deconstruidos y reconstruidos con proporciones gigantescas les definen y les llevaron a ser finalistas del último LVMH Prize. Defensores de la funcionalidad y de la actitud cool (e inmediata) que aportan las prendas a quien las lleva, Vetements no pretende crear piezas únicas e irrepetibles.
Sino que, tal como Demna defiende, “preferimos rediseñar el patrón de los básicos más deseados; y si al dar una vuelta de tuerca a esa piezas damos con una propuesta innovadora, ¡bienvenida sea!”. Y eso es justamente lo que ha sucedido con sus famosas sudaderas XXL o chándales, convertidos en las prendas favoritas de celebrities como Rihanna, Hailey Baldwin, Kylie Jenner…
Prendas cotidianas tranformadas en auténticas piezas de deseo (¡y lujo!) porque no hay que olvidar que Vetements es una firma de lujo y así lo potencian sus creadores. “Para nosotros, lo importante es no reponer existencias y, una vez que llega la pieza al showroom, es la única oportunidad que tendrás para hacer un pedido.
Cuando el artículo se agota, se agota y punto. Tuvimos varias sudaderas de la primera temporada que se agotaron inmediatamente y miles de peticiones para lanzar más. Si hubiéramos querido, podríamos haber ofrecido un millón en un día. Pero por respeto a las personas que compraron primero, no lo hicimos… ni lo haremos”.
La desilusión y prohibición dentro de la industria de la moda fue lo que motivó a Vetements a diseñar y crear prendas colmadas de autonomía, demencia y un espíritu hipotéticamente anti-chic. Y ahora son ellos los que demuestran a toda la industria que, a veces, romper las reglas no está tan mal.