Las marcas de lujo se plantean subir precios en Europa

Europa está dejando atrás la crisis económica –aunque sea lentamente- y eso se está notando en las previsiones de las compañías de lujo. En los últimos años, muchas de ellas han decidido congelar sus precios o incluso bajarlos ante el impacto que estaba teniendo la crisis en sus ventas en el Viejo Continente.

La estrategia seguida por muchas de estas marcas ha sido la de crecer en Asia, donde existía un gran potencial de crecimiento tanto en número de establecimientos con en el poder adquisitivo y el gusto de los ciudadanos de esos países por el lujo. Dado ese potencial y el crecimiento del negocio, las principales firmas siguieron subiendo los precios en otras regiones, especialmente Asia, lo que unido a la debilidad del euro ha creado diferencias significativas entre los precios en Europa y en el exterior.

Ahora, la situación está cambiando y las marcas comienzan a prepararse para ello. La primera en anunciar sus planes ha sido Chanel, que avanzó su intención de subir los precios en Europa para reducir este diferencial de precios de sus productos entre Asia y Europa. El segundo que ha anunciado el mismo objetivo ha sido Burberry, aunque en este caso prevé reducir ligeramente sus precios en Asia y aumentarlos en Europa. Esta doble medida se debe a la gran diferencia que existe ahora en sus precios entre las dos regiones, un diferencial de los más altos de la industria. En todo caso, la decisión sería solo una respuesta a potenciales movimientos de sus competidores, no una iniciativa pionera en el sector.

Otro grupo que también se ha manifestado en este sentido es el gigante del sector LVMH, que ha decidido esperar a que las divisas se estabilicen para tomar una decisión, aunque desde luego no ha descartado llevar a cabo medidas similares a sus competidores.

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