Luce una sonrisa perfecta en otoño

Hace ya unas semanas que el otoño llegó de forma oficial y aunque parece que el frío parece resistirse, ya es hora de sacar del armario los abrigos, los sombreros, las bufandas, las botas… Dejamos atrás las tardes en las terrazas y nos adentramos en cafeterías acogedoras donde una taza humeante nos haga los ratos más agradables. Un té ardiente, el aroma de un café recién hecho… ¿No es un plan más que apetecible? Las bebidas calientes se convierten en nuestras mejores aliadas pero, ¿somos conscientes de cómo pueden afectar a nuestra salud bucodental?

Para nadie es un secreto que el café no es el mejor aliado de nuestros dientes ya que tiende a manchar nuestro esmalte debido a sus colorantes. Tomarlo con leche, disminuyendo así su intensidad, o cepillarnos siempre los dientes después de consumirlo son algunas de las maneras para evitarlo. Además, el calor de las bebidas también puede afectar a nuestra sonrisa, tiñendo el esmalte con mayor rapidez. El té negro por su parte tiene un efecto parecido al café, sin embargo, el té verde tiene muchos beneficios gracias a su poder antioxidante, que nos ayuda a combatir la formación de la placa dental y disminuye el riesgo de caries.

Por supuesto, siempre tenemos soluciones para combatir todos estos pequeños inconvenientes de nuestra vida cotidiana y visitar a nuestro dentista de manera regular nos ayudará a cuidar nuestra boca como se merece. Cada vez son más las personas que se preocupan por el cuidado de su sonrisa y por mostrar una imagen impecable. Ante todo es imprescindible llevar a cabo revisiones periódicas que permitan llevar a cabo un diagnóstico completo y tratar cada caso particular.

Tratamientos como el Spa Dental, que incluye limpieza con ultrasonidos, aplicación de EasyJetPro (blanqueador compacto de flujo propulsado de cristales de bicarbonato) y fluorización para la sensibilidad, o el blanqueamiento dental, son algunos de los más demandados.

Por suerte, esta estación también nos premia con un montón de alimentos de temporada que nos ayudan a cuidar nuestra boca. Las manzanas y las peras, por ejemplo, ayudan a limpiar las encías y la superficie dental, además aumentan la producción de saliva y esto siempre es beneficioso para nuestros dientes, ¡ya que es nuestro protector más natural!

La granada es otra de las frutas clave de esta época y además de aportarnos vitaminas del grupo B y C, también nos sirve de antioxidante, por lo que, al igual que el té verde, nos ayuda a combatir la placa bacteriana. Por último, no podemos olvidarnos de la calabaza, que gracias a su alto contenido en vitamina C nos ayudará a proteger nuestras encías, ni perder de vista a las castañas o las nueces, poseedoras de fósforo que nos ayudarán a fortalecer nuestros dientes.

Con todas estas recomendaciones, seguro que podremos llevar mucho mejor la llegada del frío y, lo que es más importante, nuestra sonrisa y nuestros dientes nos lo agradecerán.