Concha Márquez Piquer, velada en la intimidad por su familia y amigos más cercanos

Concha Márquez Piquer, hija de la tonadillera Concha Piquer y una de las folclóricas más importantes que ha dado nuestro país, fallecía este lunes a los 75 años. Hace un mes fue ingresada en el Centro de Salud Somosaguas de Madrid, tras sufrir problemas respiratorios. Su marido, el actor Ramiro Oliveros, con quien iba a cumplir 40 años de relación el próximo año, habló a finales de septiembre sobre su estado.

Comentó que había «tenido ciertos problemas respiratorios que aconsejaron su ingreso». Ahora, su viudo, quien no había informado hasta ahora de la gravedad de la salud de Concha, confirmó su pérdida en un mensaje lleno de amor: «Se va también mi vida. Han sido 40 años sin separarnos para nada. Siempre estábamos juntos en todo y no concibo estar sin ella».

Concha Márquez Piquer descansará en el cementerio de San Isidro de Madrid

Los restos mortales de la actriz y cantante descansarán junto a los de su madre en el cementerio de San Isidro de Madrid. Totalmente destrozados, su marido y sus hijas Concha Romero e Iris Oliveros, han decidido que su último adiós sea privado. Sólo con los más cercanos, al margen de los focos que acompañaron a la inolvidable Concha durante toda su vida.

A última hora de la tarde de este lunes veíamos un coche fúnebre abandonar el domicilio familiar de la folclórica. Después de depositar allí sus restos mortales en el que fue su hogar y su refugio. Allí sus familiares y seres queridos han velado su cuerpo en la más absoluta intimidad. A lo largo de la jornada llegaron también varios centros de flores a la casa de Concha, como muestra de cariño de todos aquellos que conocieron y quisieron a la artista. Concha Márquez Piquer, como ha informado su viudo, recibirá sepultura este martes en el panteón familiar del madrileño cementerio de San Isidro.