Kate Middleton se despide de Sarah Burton, su diseñadora de cabecera
Desde que entrara en la familia real Kate Middleton ha confiado en el buen hacer de Sarah Burton para sus eventos más importantes.
La salida de Sarah Burton de Alexander McQueen deja a Kate Middleton sin su aliada fashion de confianza. Ella fue la elegida para diseñar su vestido de novia y desde entonces se ha convertido en la diseñadora de cabecera de la princesa en las grandes ocasiones. Premios Bafta, bautizos, bodas y cenas de gala en las que Kate Middleton ha brillado gracias al toque de la, hasta ahora, directora creativa de Alexander McQueen.
Sarah Burton diseñó el vestido de novia de Kate Middleton
La primera vez que Kate Middleton confió en la diseñadora fue en el año 2011. La ahora princesa de Gales buscaba un diseñador para su vestido de novia y se decantaba por una creación exclusiva de Sarah Burton para Alexander McQueen.
Un diseño que se componía de una falda de silueta A con volumen, una cola de tres metros de largo, y un elegante cuerpo de encaje con escote pico y maga larga.
Este vestido recibió alabanzas en todo el mundo y hoy es uno de los diseños más recordados de Sarah Burton. Tal fue el resultado, que desde entonces Kate Middleton ha contado con la diseñadora en sus momentos más importantes.
Confió en la diseñadora para la coronación de Carlos III
Prueba de ello es que la princesa apostó por ella el día de la coronación de Carlos III. En este caso, Burton creó para ella un espectacular vestido confeccionado en crepé de seda de color marfil. Tenía bordados en los bajos y puños, y un discreto escote en forma de pico que quedaba oculto tras el Manto azul de la Real Orden Victoriana.
Sarah Burton ha vestido en varias ocasiones a Kate Middleton para los Bafta
Aunque el evento en el que más veces ha lucido diseños de Alexander McQueen es en los Premios Bafta. La escogió para su debut en la alfombra roja de estos galardones en 2011 con un sencillo vestido de estilo griego en color lila pálido. Un diseño de manga corta, escote tipo barco y tiras sobre los hombros, que se ceñía al cuerpo con un cinturón blanco.
Este mismo vestido lo volvió a lucir 11 años después en los Premios Earthshot Prize de 2021, aunque con una pequeña modificación. La princesa cambió el cinturón blanco del diseño original por otro de pedrería plateado que correspondía al segundo vestido de novia que lució en su boda.
Para la edición de 2020 también lució un diseño de Alexander McQueen. En este caso, se trataba de un vestido de color blanco con detalles de hibiscos bordados en lentejuelas doradas, de manga corta y escote caja.
Aunque si hay un diseño de Sarah Burton para Kate Middleton que ha pasado a la historia de los Bafta ese es el que llevó este año. Hablamos de un elegante vestido blanco con aires helénicos, confeccionado en gasa, con cuerpo ceñido y escote asimétrico, que destaca por contar en un hombro con una gran lazada que cae hasta el suelo con el resto del vestido. Un look que Kate decidió combinar con unos guantes de ópera en color negro.
Kate Middleton celebró su 40 cumpleaños con un vestido rojo de Sarah Burton
Con un corte muy similar a este vestido encontramos el diseño de Alexander McQueen que Kate Middleton escogió para su retrato de 40 cumpleaños. Este vestido, que solo lució para la sesión de fotos, se caracteriza por su potente color rojo y su escote asimétrico, con espectacular volumen en uno de los hombros.
Siempre confía en ella para los eventos familiares
Además de fiestas y cenas de gala, Kate también ha confiado en el buen hacer de Sarah Burton para los eventos familiares más importantes. La escogió para el bautizo de la princesa Charlotte, con un conjunto de vestido y abrigo amarillo pastel con cuello solapa. Un diseño que luego replicaría casi idéntico para la boda del príncipe Harry y Meghan Markle.
También para el funeral de Isabel II fue sobre seguro con Sarah Burton. Lo hizo con un abrigo/vestido de la firma con escote en V, manga larga y falda de vuelo hasta la rodilla de color negro. Un diseño sobrio y formal que la princesa conocía muy bien.
Y es que se trataba del mismo vestido que había llevado tan solo unos meses antes para celebrar el Jubileo de Platino de la reina. La única diferencia con ese vestido fue el color, que lo llevó en blanco.