Meghan Markle reniega ahora de su biografía

Omid Scobie y Carolyn Durand, periodistas especializados en los asuntos del Palacio de Buckingham, han sido salpicados con la duda en el proceso judicial que mantiene Meghan Markle contra el grupo editor del Mail on Sunday. En una nueva vista previa al juicio, previsto en principio para el próximo 11 de enero, los abogados de la actriz han cargado contra el contenido de la biografía de la duquesa de Sussex, publicada este pasado agosto.

En su alegato, han afirmado que los autores de Finding Freedom habrían sido bastante creativos en algunos pasajes del libro. Llegan a decir en nombre de Meghan Markle que gran parte de las anécdotas íntimas que se exponen en el mismo son «extremadamente anodinas y que son producto de una licencia creativa o son inexactas».

Una exposición que ha sorprendido a todos, especialmente a los autores del libro. Porque se entendía hasta el momento que los duques de Sussex no se oponían a su publicación. Y que incluso eran conocedores de gran parte del contenido del mismo. Así lo argumentan incluso los abogados de Associated Newspaper Limited, el grupo demandado por los Sussex.

Meghan Markle defiende su intimidad en los tribunales

Fueron precisamente los abogados de este grupo editorial los que han metido en el proceso a Finding Freedom. Con ello quieren hacerle entender al juez que Meghan Markle y su entorno han colaborado y colaboran con los medios de comunicación. Y que lo hacen filtrando aspectos personales de su vida. Un asunto en el que se basa precisamente la defensa del periódico. El Mail on Sunday publicó en febrero de 2019 extractos de una carta íntima que Meghan Markle envió a su padre meses antes de su boda. La actriz considera que dicha publicación supuso un grave atentado contra su intimidad.

Pero no lo cree así la editorial, que se ampara en el derecho a la información. Y en que la pareja, sus amigos, conocidos o colaboradores han filtrado y filtran a la prensa información sobre sus vidas. Los autores de Finding Freedom, Omid Scobie y Carolyn Durand, afirman haber hablado con al menos un centenar de fuentes cercanas a la pareja y con la pareja misma para elaborar su relato.