Maridajes fáciles para Navidad

La Navidad ya está aquí. Empezamos a comprar regalos y comidas para elaborar el menú de los diferentes días de éstas fiestas. Familiares y amigos se sientan en nuestra mesa y elegimos nuestras mejores recetas.

Entonces nos surge una duda ¿con qué acompañamos cada plato? Pues aquí os dejo unas cuantas sugerencias.

Los crustáceos.
Pues quizás uno de los entrantes más típicos o tópicos en muchas mesas sean los crustáceos. Especialmente gambas y langostinos. A la plancha, hervidos, flambeados, al ajillo, etc. muchas y variadas recetas con un denominador común: ese sabor iodado y salino. Sabor a mar. Son muchas las posibilidades pero hoy os voy a recomendar un vino blanco. Concretamente un Albariño de la D.O. Rías Baixas. Su nombre: Santiago Ruiz. Su frescura y sabor afrutado son el complemento ideal para tus gambas a la plancha.

Los canelones.
Los prepare la abuela o los compremos ya elaborados, los canalones de carne (u otras variaciones) son un plato bastante socorrido y que suele triunfar, especialmente entre los más pequeños de la casa. Dependiendo de la carne o de la variante de bechamel, podemos maridar los canelones con varias opciones. Los canelones de carne de esta Navidad los podríamos acompañar con un espumoso. ¿Qué tal si pruebas un Microcosmos de Llopart? Un Cava, elaborado con Pinot Noir y Monastrell, maravilloso que nos llenará la boca de frescura y elegante estructura.

La merluza.
Mira que hay peces en el mar, pero parece que el besugo y la merluza son los pescados más usados popularmente en los menús navideños. Las recetas varían muchísimo: en salsa verde, a la Vasca, con almejas y con gambas, con pochas, etc. Un blanco del Bierzo, un godello con crianza en barrica es mi recomendación para este plato. Dominio de Tares, una bodega instaurada en León elabora este Godello de Tares, maravillosamente untuoso y gastronómico.

El asado.
Llegados a las carnes, el cordero asado o el famoso redondo de ternera se llevan la palma. Aunque estemos con el estómago saturado, aceptamos éste último plato con un “ponme solo un trocito, para probarlo” y luego te comes toda la carne más dos trocos de pan mojando en la salsa. Un vino tinto con estructura y dulces taninos que nos llenen la boca acompañan ese toque férrico de algunas carnes poco hechas. La acidez nos ayuda a equilibrar el exceso de grasa. Para el redondo os propongo el Alaya Tierra de la pequeña D.O. Almansa. Una garnacha tintorera que es una auténtica bomba.

El Turrón.
Pues a sabiendas de que me salto el postre, el turrón es un dulce presente en todas las mesas, y aunque sea como objeto de adorno, al final todos sucumbimos a su dulzor. Miel y frutos secos. Podemos ir al maridaje contraste para no caer en coma glucémico, o irnos al maridaje de afinidad y decir a dos carrillos “el día uno me pongo a dieta”. Claro que, tampoco decimos de que mes. Pues dulzor a la vida con un Casta Diva de Alicante (como el turrón).

Sí. Ya lo sé. Me he dejado un montón de platos. Pues ahí te dejo la puerta abierta para que experimentes con los maridajes y, si quieres, me lo cuentas.