El premiado Viggo Mortensen se estrena como director con ‘Falling’
La película es una recopilación de recuerdos y anécdotas de cuando Viggo Mortensen perdió a su madre. Un viaje familiar a través de la memoria y el perdón.
Ha conseguido despojarse de la capa de ese Rey Aragorn que le convirtió en la viva imagen del héroe, aunque su sombra sigue siendo alargada. Viggo Mortensen no es un actor al uso y su especialidad es “meterse en la piel” de psicóticos, asesinos y seres tortuosos. Tímido, intelectual, bohemio y solitario, es un tipo sencillo, sin ningún afán de protagonismo. De los que huyen del relumbrón de Hollywood como “alma que lleva al diablo”. Dice que le gusta dormir poco porque tiene miedo a perderse la vida y, en los tiempos que está despierto, no deja de arriesgar. Acaba de recibir el Premio Donostia por toda su trayectoria en el Festival de Cine de San Sebastián más atípico de todos los celebrados. Y allí presentó ‘Falling’, su ópera prima como director.
Sinopsis
John (Viggo Mortensen) vive con su compañero (Terry Chen) y la hija de ambos, Mónica (Gabby Velis), en California, lejos de la vida rural tradicional que dejó atrás hace muchos años. Su padre, Willis (Lance Henriksen), un hombre obstinado y perteneciente a una era pretérita, vive solo en la granja aislada en la que John se crió. Willis se encuentra en las primeras fases de la demencia senil y ya no parece capaz de lidiar a solas con las obligaciones de la granja. Cuando su estado mental comienza a deteriorarse, John decide llevarlo al oeste, con la esperanza de que él y su hermana Sarah (Laura Linney), puedan ayudar a su padre a encontrar una casa más cerca de ellos donde pueda jubilarse. Las buenas intenciones de Sarah y John topan contra la airada negativa de Willis a cambiar en modo alguno su estilo de vida.
La tensión entre Willis y el resto de la familia va en aumento. Su abrasiva personalidad, a ratos cáustica y a ratos algo divertida, agravada por la pérdida de memoria, provoca que el pasado y el presente entren en conflicto. Y que viejas heridas y años de desconfianza mutua entre padre e hijo salgan a la superficie.
A medida que John y él se van enfrentando a los sucesos que los fueron separando, incluyendo sus recuerdos discrepantes de Gwen (Hannah Gross), la madre de John, el desafío para ambos es encontrar un modo de perdonarse. De aceptar lo que ha sucedido en el pasado y lo que está sucediendo en el presente. Un viaje que va de la oscuridad a la luz, de la rabia y el resentimiento hacia una aceptación y un perdón ganados a pulso.
Una película dedicada a sus hermanos
Cuando falleció su madre, Viggo se puso a recopilar recuerdos y anécdotas familiares. Fueron tantas que quiso darles forma en una película. Le costó conseguir financiación para sacarla adelante, pero “como soy muy persistente, estaba seguro de que lo conseguiría”. Y así fue. ‘Falling’ está dedicada a sus hermanos “porque ellos reconocieron en el guion esos pasajes familiares que nos marcaron”.