Desde hace varios años, al inicio de la temporada estival, proliferan los artículos y las noticias en las que se alerta de que el verano precipita los divorcios, según las estadísticas. Pero lo que es una realidad es que cada vez hay menos divorcios en nuestro país.
Según el Tribunal Superior de Justicia de Madrid, el número de divorcios por lo contencioso disminuyó en un 4% en 2013 respecto al año anterior. Separarse por las buenas, o no separarse, parece ser la tendencia actual: Mientras que las separaciones descendieron un 62%, los divorcios por mutuo acuerdo crecieron en más del 33%.
Hay menos divorcios y eso a pesar de que España se apunta a la línea europea, que gana por goleada a la americana en cuestión de divorcios, según ‘Business Insider’ el 61% español contrasta con un 53% de divorcios en Estados Unidos y un 15% en México, por poner ejemplos.
Una de las ideas que se manejan como origen de los divorcios después del verano es que el exceso de convivencia en parejas que apenas se ven el pelo durante el año genera un alto estrés emocional o, lo que es lo mismo, ¡pone de los nervios! ¿Por qué?
Sin duda, pasar de “ser libre” a tener que dar cuentas de lo que uno hace cada minuto del día puede, cuanto menos, resultar chocante. Si además hay que compartir todo ese tiempo en ‘consenso’, puede rallar la pesadilla o suponer esa prueba de amor y de paciencia que, se entiende, viene en el pack marital.
“Él odia el club de playa”; “Ella odia los deportes de viento”; “Él quiere su paellita con su espeto”; “Ella no soporta el calor y el olor a churrasco”; “Él no quiere coger chica porque no se tarda nada en hacer las cosas”; “Ella jamás hace nada pero va a Zahara de los Atunes a limpiar baños”…
Son muchas las razones para vivir el verano de forma estresante y los niños son una de las que más pesan entre los pesares estivales, con todo ese tiempo libre y toda esa demanda de atención parental, en pugna con lo que uno elegiría hacer, de forma natural: leer las cuatro novelas de la maleta, salir a cenar por la noche, ‘echar la siesta’ con la pareja… Por otra parte, no sólo la convivencia trae divorcios en septiembre, sino que son muchas las parejas que se toman precisamente el verano para “darse un tiempo” y materializarlo después.
Muchas razones para estresarse, pero también muchas alegrías: ¿qué tal reencontrarse de nuevo con la pareja, ese gran desconocido con quien se duerme por las noches? ¿Qué tal echarse un parchís con los niños y que se cuenten sus historias? ¿Qué tal practicar esas recetas vistas hacer en “Master Chef” y negociar el “yo cocino y tú friegas”?
Disfrutar del verano sabiendo que lo mejor que tiene es la ‘desconexión’ con el trabajo, descansar un poco y tener presente que dura como máximo cuatro semanas es, junto con el dato del descenso en los divorcios, la mejor medicina preventiva para evitar la catarsis marital y volver como nuevo a la divina rutina. Así pues, ¡a disfrutar de lo que queda de verano en pareja y sin temor!
Desde la reina Letizia a la cantante Rosalía pasando por la actriz Penélope Cruz o la… Read More
Eva Longoria es una declarada enamorada de nuestro país, especialmente de Marbella. Es habitual verla… Read More
La infanta Sofía cumple hoy 17 años. La hija pequeña de Felipe VI y la… Read More
Tal día como hoy de hace 13 años se casaban un joven príncipe William y… Read More
El príncipe Harry regresará en unos días a Londres para celebrar el décimo aniversario de… Read More
Carlos III quiere regresar a lo grande a sus funciones públicas. El pasado viernes, el… Read More
Este sitio utiliza cookies para prestar sus servicios y analizar su tráfico. Las cookies utilizadas para el funcionamiento esencial de este sitio ya se han establecido.