El outfit más horrible de Meghan Markle

Mira que nos cuesta criticar a Meghan Markle. La adoramos, nos parece natural, bellísima y sin complejos; como su marido, nuestro príncipe y miembro favorito de la realeza europea. Y dicho esto, tenemos que decir que estamos horrorizadas con el último look de Meghan.

Ese vestido negro con grandes estampados de animales salvajes nos ha dejado sin respiración. Y la combinación con las botas de ante verde botella de inspiración años 80 tampoco nos han convencido nada. Con lo ideal que está siendo el embarazo de Meghan, una lección de estilo y elegancia, este outfit mostrado en la casa de acogida de mujeres prostitutas, nos ha dejado en shock.

 

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Como es de esperar, un embarazo cambia la vida de las parejas y sobre todo, el cuerpo de la madre. Desde que supimos la noticia de que los duques de Sussex iban a ser padres, los outfits de Markle han causado sensación.

 

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En este collage podemos visualizar las prendas, tirando a tonos oscuros, que vistió los primeros meses de gestación, pero a medida que ha ido pasando el tiempo, muchos looks nos han dejado sorprendidos por la elegancia que irradiaban.

En la siguiente imagen destaca su estilo sobrio marcado por el vestido negro con cuello redondo que estiliza su figura y su “barriguita“, acompañado de un abrigo color camel que da un despunte de color al outfit. Aunque los tacones le dan un aire de frescura al total look, lo principal es el toque final, un moño bajo que le enmarca y da vida al rostro. Sin duda, este look fue rompedor. 

 

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Aunque han sido numerosas las ocasiones en las que la duquesa ha homenajeado a la que hubiera sido su suegra, Diana de Gales. Tanto el vestido midi de Aritzia de color morado como el abrigo de corte batín de Sentaler en color rojo, recordaban a la eterna princesa por los diseños y sobre todo por los llamativos colores, que no suelen estar en el armario de Meghan. Diana llevó estos colores gracias a un diseño Catherine Walker y lo lucía tanto con un sombrero bicolor de Philip Somerville como sin él, según marcara el dress code de cada situación.

 

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Pero esta vez, la duquesa de Sussex no ha acertado en la decisión del vestido. Aunque fuera negro y de gasa, los estampados tan grandes le favorecían más bien poco, haciendo que su cuerpo pareciera más ancho de lo que es. No siempre se acierta, eso está claro.

*Imagen destacada: Instagram @kensingtonroyal