Diana buscó el apoyo de buenos amigos antes de separarse del príncipe Carlos

Corría el verano de 1990 cuando la princesa Diana acudió a pasar unos días de descanso con unos amigos al yate TMBlue One, propiedad de Valentino. Un acontecimiento que hemos conocido de la mano del cofundador de la casa de modas, Giancarlo Giammetti, que treinta años después ha compartido varias fotos de aquellos momentos a través de su Instagram. Apasionado de la serie The Crown, Giammetti ha puesto, probablemente sin quererlo, el foco sobre la importancia que tuvieron las amistades de la princesa en los momentos más difíciles de su vida. Unos años en los que comenzó a tener claro que su futuro no estaba dentro de palacio.

Las fotografías muestran a Diana relajada, en bikini, con una camisa morada anudada a la cintura. Se encuentra sobre la cubierta del barco, con el pelo mojado y una bebida en la mano. Dialoga con un grupo de amigos. Entre ellos se encuentra el diseñador Valentino Garavani, el príncipe Kyril de Bulgaria y su ex-mujer, Rosario Nadal. Al fondo, la pequeña isla de Stromboli, frente a la costa norte de Sicilia.

La princesa Diana encontraba en los yates amigos y privacidad

En aquellos tiempos, Diana ya vivía alejada del príncipe Carlos. Ella y su marido hacían vidas completamente separadas, a pesar de compartir dos hijos y una actividad pública que les unía cada vez en menos ocasiones. Se cree que el hijo de Isabel II retomó su relación con su ex-novia, Camilla Parker-Bowles, en 1987. Y que Diana se había refugiado en los brazos de su guardaespaldas, Barry Mannakee, que falleció ese mismo año provocando «el mayor golpe de mi vida», según dijo la princesa posteriormente.

En el verano de 1990, cuando se realizaron dichas fotografías, Diana acababa de terminar un romance de dos años con el oficial de Caballería, James Hewitt. Diana y el príncipe Carlos anunciaron su separación dos años después, en diciembre de 1992. El divorcio llegó más tarde, en 1996, forzado por las presiones de la reina Isabel II tras la polémica entrevista que Diana concedió a la BBC meses antes. Lady Di siempre fue una apasionada de los yates. Lugares donde podía ser ella misma y reunirse en privado con amigos sin que la prensa les molestara.