Ralph Lauren, el hombre más allá de la marca

Una marca con estilo contemporáneo, atemporal, que gusta al cliente fiel a su marca que no acostumbra a cambios drásticos en sus diseños, cada vez que lo ha hecho ha fracasado. Pero ahora fiel a sus principios de marca creada en 1967, Ralph Lauren ha sabido reinventarse al mismo tiempo que proponer iniciativas dentro de su zona de confort y cosechar éxitos en todos los ámbitos que se propone.

Hoy no quiero hablarles económicamente de Ralph Lauren, intento trasladarles a sus logros y su vida. Tan sólo felicitar a la marca y a su equipo por haber triplicado beneficios en su tercer trimestre fiscal. Logró, esta vez sí, triplicar sus ganancias con un +178 %. Registró un beneficio neto de 334,1 millones de dólares (302,7 millones de euros) en su tercer trimestre fiscal, finalizado en diciembre. Y una facturación de 1.750 millones de dólares (1.586 millones de euros), un 1,4 % más.

Los modestos  inicios  de Ralph Lauren

Más allá de esto intentaré hacer una breve biografía de esta marca y sobre todo del diseñador y creador tan interesante por ser global. Ralph Lauren nace de una colección de corbatas anchas de alta calidad en 1967. Un año más tarde, en 1968, presenta su primera colección completa de hombre. Al hacerla pública dijo: “Quería mostrar algo más de romanticismo” y añadió “necesitaba algo que me emocionara”. Quizás esta frase ya llega para definir a este hombre que luchó en décadas muy difíciles en la moda.

En 1970 abre su primera tienda Polo by Ralph Lauren en los legendarios grandes almacenes Bloomingdale`s. La verdadera expansión de Ralph Lauren coincide con la década de los 70, ya que en 1971 abre su primera tienda propia en Rodeo Drive, Los Angeles. Años de esperanza y gloria expansiva que le llevaron a abrir tiendas en Houston, Atlanta, Dallas, Detroit, Chicago, Palm Beach y Fort Lauderdale (Miami). El icono del caballo bordado nace también en 1971 en una colección de mujer inspirada en sus camisas de hombre. Fue el renacimiento puro de un icono único y diferenciador. En 1972 nace el polo de manga corta de hombre. Tuvo inspiración femenina en 1972 en la cual presentó la primera colección para mujer.

Su idilio con Hollywood

Hollywood y Ralph Lauren estuvieron siempre unidos de la mano. De hecho fue en 1974 cuando diseñó toda la colección de hombre para la fabulosa película El Gran Gatsby a excepción de un traje rosa que hizo específicicamente él, Ralph, para Robert Redford como Jay Gatsby. Toda Norteamérica y parte de Europa se vio identificada en la película y la fama de la marca creció como la espuma, eran años gloriosos cuando todas las colecciones se agotaban en las tiendas.

Los primeros premios de Ralph Lauren llegarían en 1976 cuando gana un doble premio como diseñador. Precisamente el Coty por su colección de mujer y el Coty Hall of Fame por la colección de hombre. En este mismo año todas las grandes publicaciones de moda y medios escritos aclamaban la fama del diseñador que mejor supo posicionar su marca como global.

Otro hito que quedará para la historia de la moda y el cine fue en el año 1977 en el cual el diseñador participara de lleno en la película de Woody Allen “Annie Hall”, Lauren mostró sus mejores diseños para Diane Keaton, por cierto con grandes galardones Oscar en el film, cosa que también catapultó a la fama al diseñador y a su marca. Un año más tarde saca su fragancia en forma de frasco verde para hombre. La primera colección de ropa vaquera para hombre realizada por Lauren nace en 1979.

Comienza su expansión internacional

Fue en el año 1981 cuando la marca se expande fuera de Estados Unidos, su primer mercado fue Reino Unido, Londres, en la exclusiva calle New Bond Street. Su primera colección de ropa para el hogar nace en 1983. La primera reinvención de Lauren no tuvo lugar en estos momentos ya lo hizo magistralmente en 1986 cuando en una exquisita tienda de varias plantas rediseña su perfeccionismo por una tienda con materiales exquisitos en Madison Avenue.

Fue el año 1989 cuando una buena amiga, Nina Hyde fallece, era una gran columnista y escritora de moda del Washington Post. En ese mismo año, Ralph Lauren nace como filántropo contra el cáncer con una nuevo Hospital Universitario de Georgetown consagrando su apoyo total a esta causa.

«No hay que rendirse nunca»

En 1991 recibe un gran premio por su trayectoria CFDA y en el discurso exclamó emocionado “No hay que rendirse nunca”. Cuatro años más tarde, en 1995, lanza sus llamativos colores de pinturas: «Para cambiar vidas hay que cambiar ambientes”, dijo cuando presentó su colección más extensa con más de 400 colores en toda la gama de colecciones.

Ya en 1997 saca su empresa a la Bolsa de Nueva York, una empresa que facturaba más de 1.000 millones de dólares por aquellos tiempos. Irremediablemente hay que regresar al mundo de la meca del cine, cuando Ralph Lauren vistió a una explosiva Gwyneth Paltrow de rosa largo, con un vestido hipnotizador en 1999. Esa velada la actriz ganaba un Oscar a mejor actriz con la película Shakespeare enamorado. Esa noche brilló gracias a Ralph Lauren.

Comienza a diversificar su marca

En 1999 nace su primer restaurante RL Restaurant, pegado a la tienda más grande de todas, en Chicago. Lauren era veloz, al mismo tiempo que diversificador de su imperio. En el año 2000 nace Polo.com con una primera inmersión en el mercado digital. Sabía que había que ir con los tiempos y no había tiempo que perder. Y ya en 2002 lleva su mundo de colecciones a las pasarelas de Milán. Quería y luchaba por estar dentro de los grandes del negocio de la moda.

En 2006 Polo Ralph Lauren se convierte en proveedor oficial del torneo de Wimbledon, y en el año 2007 consigue ganar su segundo premio por mejor diseñador CFDA a la mejor colección de diseño masculino del año, premio presentado por Oprah Winfrey la cual dijo: “Ralph Lauren es el mejor embajador de los Estados Unidos que cualquiera nombrado por la Casa Blanca”. Otro hito histórico fue cuando al año siguiente consiguió ser el proveedor oficial de Pekín 2008 para el Team USA.  Nadie mejor que él para demostrar al mundo su buen gusto y combinación de pantones en prendas.

Llaves de Nueva York

Michael Bloomberg en 2010 le entrega las llaves de la ciudad de Nueva York con motivo de la inauguración de la Flagship en el 888 Madison Avenue. En 2011 muestra su pasión automovilística; su colección de coches de lujo antiguos los cuales son dignos de ver en una gran publicación Làrt de L’automobile. Infinidad de fechas hay que señalan a este gran hombre de la moda y filántropo ante todo. Llegaba el año 2016 cuando Ralph Lauren inauguraba su Centro de Investigación sobre el Cáncer de Mama.

Actos filantrópicos, el cine, el constante diseño y los negocios… más tarde llega su reconocimiento del Museo de Arte Contemporáneo MoMA, por el icono del Polo de manga corta, esto fue el año 2017. La colección del polo marca un nuevo hito por la nueva moda más atemporal, por ello está allí representado.

En los pasados Juegos Olímpicos de Pyeongchang 2018 destaca el I+D de la marca con una prenda diseñada para el equipo de EEUU, la cual permite mantener el calor controlado hasta 11 horas electrónicamente mediante un sistema térmico integrado. Causo furor la prenda colección del equipo USA.

50 aniversario

Durante 2018 la marca  y el aclamado Ralph Lauren celebra en Central Park rodeado de estrellas, musas y famosos su 50 Aniversario, acto colofón de 50 años dedicados exclusivamente a crear moda y algo más que moda transmitir valores que demuestran que tal como él dice “No hay que rendirse nunca” ó su mítico mantra “ Never give it up”.

Todas y cada una de sus campañas tienen un sello de identidad y son fotografiadas por el grandioso Bruce Weber. Cada una ha sabido recoger, reestimular y difundir como pocos los productos que son parte de la herencia cultural y social anglosajona. Unos artículos marcados por su indisociable y exclusivo logotipo icono de la marca, un jugador de polo a lomos de un caballo.

Disclosure: El medio no se responsabiliza sobre las opiniones expuestas en el artículo. El texto ha sido escrito de manera libre expresando ideas propias, sin recibir ninguna compensación por ello. El autor no tiene ninguna relación de negocios con cualquiera de las empresas cuyas acciones se mencionan en este artículo.  *Imágenes: Gtres