La peli que Tom Hanks ‘tenía que hacer’

Dicen que tenerle en una película es sinónimo de garantía, ya no solo por la taquilla que pueda hacer (sus películas llevan recaudados cerca de 5.000 millones de dólares), sino por el clima de complicidad que crea en el ambiente. Con fama de buen compañero, Tom Hanks es capaz de amansar a la actriz más indómita. Íntimo amigo del genio Spielberg, con el que empezó como actor y terminó como socio/productor, este californiano que en unos días cumple los 60, estrena ‘Esperando al rey’ (1 de julio), una comedia dramática sobre las peripecias en Oriente Medio de un ejecutivo americano en horas bajas.

Sinopsis: Alan Clay (Tom Hanks) es un empresario americano que no ha sido capaz de triunfar en los negocios. Defraudado y decepcionado, decide comenzar un nuevo proyecto allá donde pueda. Por esta razón se traslada a Arabia Saudita, donde la economía se encuentra en pleno auge. Ésta será la última oportunidad de Alan para evitar la ejecución de su hipoteca, asumir los gastos de la matrícula universitaria de su hija y conseguir el reconocimiento de los que le rodean.

Todo empezó en 2012, cuando Tom Hanks tuiteó lo mucho que le había gustado la novela de Dave Eggers. “Devoré ‘Esperando al rey’ de una sentada”, comenta el actor  “y al terminarlo, una pregunta me rondó la cabeza: ¿El autor vería bien que se hiciera una película basada en su libro?”. La historia “me tocó la fibra de una forma muy particular. Me pareció una novela muy actual y, por ese motivo, sabía que no había tiempo que perder. Además de retratar a la perfección el mundo contemporáneo, también tiene ese aire de novela clásica, de obra que perdura en el tiempo. Esa combinación de actualidad y atemporalidad me cautivó y me centré de lleno en ponerla en marcha lo más rápido que pude”.

La mayor dificultad con la que se encontraron a la hora de convertir la historia en una película creíble en la gran pantalla, fue adaptar el sentido del humor extraño del libro, mezclado con muchos momentos melancólicos e incluso trágicos. Lo consiguieron al utilizar el encanto natural de Hanks para centrarse en los elementos más cómicos de la dramática situación de su personaje.

Tom Hanks es, junto a Louise Rainer, Spencer Tracy y Katharine Hepburn, uno de los actores que ha ganado el Oscar al Mejor Intérprete Principal en dos años consecutivos: en 1994 por su conmovedor retrato de un abogado enfermo de sida en la película ‘Philadelphia’ y, al año siguiente, por su extraordinaria interpretación en ‘Forrest Gump’. Se alzó también con Globos de Oro por ambas películas y un premio del Sindicato de Actores (SAG) por la segunda. Su labor interpretativa le ha merecido también candidaturas a los Oscar por ‘Big’, ‘Salvar al soldado Ryan’ y ‘Náufrago’. Su palmarés de estatuillas también incluye Globos de Oro por ‘Big’ y ‘Náufrago’.

Su último trabajo ha sido ‘El puente de los espías’, a las órdenes de su amigo Spielberg y, tras ‘Esperando al rey‘ le veremos en ‘Inferno’ de Ron Howard, ‘The Circle’ de James Ponsoldt y ‘Sully’ de Clint Eastwood. Una muestra más que evidente de que nos encontramos ante uno de los actores más respetados, solicitados y prolíficos del actual panorama cinematográfico internacional.