Cuando pensamos en robótica o en programación, antiguamente solía asaltarnos el estereotipo de números, letras y enunciados en lenguajes complejos, manejados por aquellos que en su infancia y adolescencia ya apuntaban maneras y resultaban un poco raros, o incluso nerds, como se les conoce en América. Ese modelo ya no existe y ahora el nuevo cool entre niños y adolescentes es saber programación, robotics y otras nuevas asignaturas relacionadas con las TIC, que despuntan con notable protagonismo entre los más jóvenes.
Bienvenidos sean los bolígrafos en el bolsillo (ahora más bien gadgets), las gafas de pasta y todo lo que pueda relacionarse con estas nuevas asignaturas que responden a un reciente modelo social inmerso en las nuevas tecnologías. Mucho de esto se lo debemos agradecer a Lego, tal y como explica José Luis Pastor, responsable pedagógico de Fun Tech Academy: “Lego nos puso en un camino de acercamiento de la robótica a niños y jóvenes que en los últimos tres años ha culminado en una explosión de alternativas para el acercamiento de las ciencias a los jóvenes”.
¿Qué es la robótica?
Aunque podemos encontrar muchas definiciones de la robótica, una podría ser “la ciencia que estudia el diseño y creación de máquinas que son capaces de ejecutar acciones con un cierto grado de inteligencia”, explica el experto. “Más complejo es hablar sobre lo que técnicamente se considera un robot, porque cuando se nos viene a la cabeza esta palabra, siempre nos imaginamos humanoides o máquinas con formas asimiladas a seres vivos, al ser la imagen transmitida habitualmente por los medios y la industria del cine”.
Más allá de C-3P0 y R2-D2, nos asombraría saber con cuántos robots interactuamos a lo largo del día. “Vivimos rodeados de robots en nuestra vida diaria y podemos encontrar elementos robóticos que realizan tareas de lo más variadas, desde labores de ámbito social, multitud de asistentes de fabricación hasta componentes robóticos que controlan la suciedad de las prendas en nuestras lavadoras”, añade el experto.
Nativos digitales
Con frecuencia se oye hablar de los “nativos digitales” para referirse a las nuevas generaciones que no conocen una vida sin Internet ni dispositivos. Sin embargo, esto es matizable, aclara José Luis Pastor. Desde su experiencia trabajando con menores y tecnología, los nativos digitales no son realmente tan nativos: “Aunque tienen una cualidad innata para el uso de tecnología, es siempre desde un punto de vista de uso pasivo. Todos saben encender un dispositivo, encontrar un contenido y usarlo, pero es difícil encontrar chavales que sepan crear o desarrollar valor con tecnología”.
Y ahí es donde comienza su papel como educadores en esta materia. “La competencia de crear con tecnología no es sencilla de desarrollar de forma autónoma por el niño, sino que hay que potenciarla, y para ello la programación, junto a otras naturalezas de conocimiento digital sí convertirán a los chavales en auténticos nativos digitales”.
La robótica: ¿Una nueva asignatura para los niños de hoy?
Desde el punto de vista de entendidos como José Luis Pastor, sí: “La robótica, como otras áreas de conocimiento, se ha transformado para poder ser usada y disfrutada por la sociedad en general”. Hace unos años, los conocimientos que eran necesarios para poder programar acciones básicas en un robot, estaban solamente al alcance de unos pocos científicos con grandes conocimientos de informática y electrónica.
“Actualmente cualquier persona puede disfrutar con la satisfacción de crear máquinas propias que les ayuden en tareas como medir si una planta necesita riego, detectar si una habitación necesita más o menos luz o emular el funcionamiento de grandes brazos robóticos utilizados en cadenas de fabricación, para jugar con sus hijos a recoger los juguetes de la habitación”, explica el director de Fun Tech Academy.
Al igual que ha sucedido con los smartphones, que no dejan de ser pequeños ordenadores con altas prestaciones que incluyen cámaras de foto que hace unos años se considerarían profesionales, la robótica se ha democratizado en cierto modo, al volverse doméstica: “ahora los niños y jóvenes tienen a su alcance medios y formación que les permite crear robots que ejecuten acciones que estaban en manos de grandes científicos hace menos de una década”, explican desde esta academia tecnológica.
Lego y Robotics
Más de uno se preguntará qué tiene que ver Lego con la robótica, y por qué se usa para aprenderla. Así lo explica Pastor, remontándose a los orígenes de esta relación: “Cuando LEGO arrancó este camino de acercar las ciencias a los más jóvenes tuvo algún que otro fracaso y con ello aprendió que tenía que unirse a los mejores. Buscó la colaboración del Instituto Tecnológico de Massachuset (MIT), más concretamente de su Media Lab, pionero en la socialización de la producción digital para los más pequeños, generando lenguajes de programación asequibles para personas sin una gran formación técnica bajo unos paradigmas pedagógicos basados en el constructivismo. Lego y el MIT fueron los primeros en aplicar pedagogías de Learning by doing (aprender haciendo) en lugar de metodologías basadas en la instrucción o clase tradicional”.
Que sea un matrimonio de conveniencia, poco debería importarnos, ya que LEGO aporta muchas ventajas en el aprendizaje de la robótica para los pequeños de la casa: “En primer lugar, está el aspecto familiar que tienen las piezas de LEGO para ellos, acostumbrados a ver esas piezas desde muy temprana edad y que para ellos es un paso natural en sus procesos de construcción y recreación de la realidad”. Pero además, los kits de robótica de LEGO están diseñados específicamente para educación, lo que les confieren una robustez para que los pequeños puedan probar y montar sin miedo a romper nada. “Desde el punto de vista técnico, están dotados con interfaces de programación visuales que hacen que la introducción de la lógica de los algoritmos para los más pequeños sea algo muy natural para ellos”, explica el pedagogo.
Beneficios educativos y psicológicos
La robótica por si misma tiene muchos beneficios en los procesos de maduración de nuestros chicos:
Campamentos de verano tecnológicos
A medida que se acerca el periodo estival, muchos padres buscan una manera de conciliar su propio trabajo con las vacaciones de sus hijos, tratando de convertir este intervalo en una experiencia educativa a través de algún campamento de verano. Entre estos pujan con fuerza los campamentos tecnológicos como los que ofrecen en Fun Tech Academy, donde niños y no tan niños podrán aprender materias tan fascinantes como estas:
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