El verano se inicia oficialmente en junio, pero parece que hasta que no nos vamos de vacaciones no nos inunda ese espíritu estival tan característico y que tan bien conocemos. Ahora que ese momento ha llegado para la mayoría, casi con toda seguridad que viajaremos, generalmente acercándonos a disfrutar de la naturaleza y del mar.
Sin embargo, aquí empiezan los problemas para nuestros dispositivos, fieles compañeros allá donde vayamos, sea playa o montaña. Uno de ellos, y quizá el más importante debido a las importantes olas de calor que estamos viviendo este verano, es precisamente el de las altas temperaturas. Te contamos cómo afecta el calor a nuestro móvil y algunas cosas que puedes hacer para remediarlo.
A nosotros nos emociona hacer maletas para irnos de vacaciones, pero resulta que a nuestros móviles no les gustan tanto la playa y el calor, ya que el 40 % de las averías se producen precisamente en verano, entre junio y agosto, según informa el departamento de reparaciones de The Phone House. ¿Por qué? La mayoría de las veces los problemas se deben a exposición de los móviles al calor, sobrecalentando el dispositivo y poniendo a prueba sus mecanismos de ventilación, que resultan a todas luces insuficientes.
Para evitar que el móvil nos la juegue en el peor momento y deje de funcionar por calor, lo primero será hacer uso del sentido común, o al menos evitar el despiste. No dejarlo olvidado dentro del coche o junto a una ventana a pleno sol. Otra manera de prevenir el desastre cuando veas que hace demasiado calor es usando los siguientes trucos:
Si te has hecho esta pregunta, no eres el único, y te tranquilizará saber que la probabilidad de que explote el teléfono por calor es muy remota. Pero nos referimos a unas temperaturas de verano, no a meterlo en el horno a 200 grados a ver qué pasa, ni por descontado a meterlo en el microhondas.
Según Apple, sus smartphones están diseñados para soportar temperaturas muy extremas sin que les pase nada. De hecho, mientras estén entre los -20 y 45ºC , el móvil sobrevivirá en estado de reposo, aunque en temperaturas muy altas o muy bajas comenzará a fallar.
Con un frío severo, verás que simplemente se descarga toda la batería de repente y se apaga. Con calor, en cambio, la pantalla se pondrá negra, y te avisará el propio iPhone. En este caso, deberás apagarlo cuanto antes y dejar que se enfríe en un lugar fresco. No aproveches para intentar cargarlo porque el dispositivo no te va a dejar.
Y si bien no explota, si se produce algún golpe grave por dentro y se salen y mezclan sus componentes con los líquidos de la batería por algún tipo de corrosión interna, el móvil podría empezar a echar humo, con peligro de incendiarse o de generar toxicidad. En este caso, tendrás que situarlo en algún lugar ignífugo y llevarlo a algún punto limpio, informando al receptor de la situación de esa batería.
Ante los problemas, soluciones, y mejor en forma de App. Afortunadamente existen algunas que controlan y miden la temperatura del móvil.
En Android encontrarás, por ejemplo, Cooling Master, que monitorea el teléfono para vigilar y controlar la temperatura detecta. Lo consigue cerrando las apps que más energía consumen, y de esta manera, reduce el uso de la batería y baja la temperatura del teléfono.
Otra opción de aplicación es Coolify, que funciona como un sensor de calor regulando la temperatura del teléfono, y permite poner en marcha una especie de ventilador para que lo enfríe.
En iOS hay menos aplicaciones específicas para enfriar el celular, pero sí muchos consejos sobre lo que hacer en caso de sobrecalientamiento del móvil. Lo bueno es que los propios iPhone te avisan del momento en que no pueden funcionar debido a la temperatura. Llegados a este punto, sólo podremos hacer llamadas de emergencia y tendremos que enfriar el teléfono para retomar el uso.
Otras Apps determinan no sólo la temperatura de este, sino qué funcionalidades del móvil lo recalientan más por generar una mayor carga de energía.
E incluso ya se puede usar el teléfono como termómetro para comprobar que estamos todos bien y no hemos cogido otra vez el Covid. Ahora que uno tiene tiempo durante las vacaciones siempre puede echarle un rato para encontrar la aplicación que mejor se adecúa a sus necesidades. ¡Cualquier cosa con tal de proteger nuestro Smartphone!
Además de las apps, afortunadamente existen montones de complementos y gadgets en el mercado para paliar el problema cuando este se produce. Podrás encontrarlas fácilmente en Amazon.
Por ejemplo, dentro del coche, uno de los lugares donde el teléfono precisamente se recalienta más, siempre podremos comprar uno de esos portamóviles, e instalarlo sabiamente junto a la salida del aire acondicionado, y de paso usar el GPS del móvil para viajar.
Por otro lado, existen fundas térmicas para el teléfono con las que protegerlo del sol y del calor. Además, algunas de ellas protegen del agua y, por supuesto, de la arena de la playa.
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