Irina Shayk vuelve a poner de moda los ear cuff con su look más sorprendente
Irina Shayk acudió a una fiesta en Milán luciendo unos espectaculares ear cuff que combinó con un arriesgado vestido.
Irina Shayk causó sensación con su look en la fiesta de una conocida firma de belleza. La modelo decidió apostarlo todo al brillo de los cristales tanto con su vestido como con sus joyas. Éstas últimas fueron las grandes protagonistas gracias a los llamativos ear cuff que lució en ambas orejas. La modelo apostó por sustituir clásicos pendientes por este curioso accesorio que vuelve a ponerse de moda este invierno.
Irina Shayk vuelve a poner de moda los ear cuff
Tan solo hay que echar un vistazo al catálogo de Navidad de Swarovski para darse cuenta de que los ear cuff vienen fuerte esta temporada. Los pendientes grandes y largos pasan a un segundo plano y dejan espacio a los ear cuff que veremos, prácticamente, por toda la oreja, transformando esta parte del cuerpo en una joya en sí misma.
Así lo ha lucido Irina Shayk en su último compromiso profesional en Milán. La modelo apostó por los cristales como protagonistas de su look, tanto en el vestido como en las joyas. En concreto, Irina escogió los pendientes de clip Matrix de Swarovski para lucirlos a modo de ear cuff. Hablamos de dos aros gruesos formados por diferentes cristales con forma rectangular, que lució uno pegado al otro y agarrados a la concha de la oreja.
Irina Shayk decidió prescindir de pendientes y apostar por los ear cuff como únicos complementos. Una propuesta diferente y muy bien adaptada al brillante look que escogió para la ocasión.
Lució un minivestido de cristales con una chaqueta de chándal
La modelo deslumbró a los allí presentes con un sexy y atrevido minivestido de la firma Retrofête, con escote halter, confeccionado en nylon de color beige, imitando la piel, y con miles de cadenas de strass y brillos que caen desde el cuello, hasta el bajo del vestido. Un diseño joya cuyo nombre es, casualmente, Irina y cuyo precio es de 1.800 euros.
Irina Shayk completó el look con unas elegantes y altísimas sandalias atadas al tobillo en color beige y un complemento poco habitual para una alfombra roja, una sudadera. La modelo llevó una sudadera negra oversize de estilo chándal y atada con cremallera, que lució a modo de capa, caída por los hombros.