Mercadona invierte un millón de euros en «Lo que importa no se ve»
La próxima campaña navideña de Mercadona pretende poner el valor la calidad de los productos de su Perfumería y todo el trabajo previo a su comercialización.
En una época de incertidumbre como la que atravesamos, lo inmaterial cobra especial importancia. “Lo esencial es invisible a los ojos”, decía El Principito en la famosa novela de Antoine de Saint-Exupéry, algo con lo que Mercadona también está de acuerdo tal y como lo demuestra en su última campaña para Navidad. Bajo el slogan de ‘Lo que importa no se ve’ la cadena de supermercados pretende poner valor y promocionar los productos de su Perfumería, destacando el trabajo que hay detrás de ellos e identificándolos como elementos imprescindibles que forman parte de nuestra esencia y nuestra identidad.
Como viene siendo habitual, Mercadona ha llevado a cabo esta iniciativa tras escuchar a sus Jefes o clientes. Gracias a su demanda, la firma ofrece más de 100 fragancias y productos de cosmética elaborados por los Proveedores Totaler RNB, Flor de mayo, Premi, Firmenich, Global Fragance, Symrise, Wecolors, Givaudan y You Cosmetics.
La última campaña de Navidad de Mercadona
La campaña para las próximas fiestas nace de la idea de que en el mundo de la perfumería se valoran generalmente solo los elementos visibles como la imagen, el diseño o la marca. Pero también hay otra parte igual de importante. ‘Lo que importa no se ve’ pretende destacar el minucioso trabajo que hay detrás del proceso de elaboración de los productos de Mercadona, con el objetivo de obtener la máxima calidad.
«La selección de los mejores ingredientes, las horas de esfuerzo y el talento de los proveedores especialistas es lo que define la calidad. Aquello que hace únicos nuestros productos. Todo eso que no se ve y que para nosotros es lo más importante», explican desde Mercadona.
Poner en valor un proceso de selección único
Así, la empresa valenciana explica que el primer paso para la elaboración de los productos de su Perfumería es «escuchar las preferencias y necesidades de los clientes». Algo que se hace a pie de tienda y en los centros de coinnovación antes de definir la información en el departamento de Compras. Allí los proveedores especializados reciben el mensaje y comienzan a trabajar en la fase de creación, en el que utilizan «los mejores recursos y materias primas» para elaborar distintas propuestas de producto. «Siempre buscando la máxima excelencia«, apostillan.
Finalmente se hace una selección de las mejores propuestas y los especialistas de producto se vuelven a reunir con los clientes para conocer su opinión. Y solo aquellos productos que cumplen con lo que el cliente quiere, salen a la venta.