Un paraíso para el turismo que funciona con energía renovable
Iberdrola ha inaugurado en Brasil la central hidroeléctrica de Baixo Iguaçu, que suministrará energía limpia a un millón de brasileños y asegurará el caudal a sus célebres cataratas.
La energía que nos puede proporcionar el viento, el sol o el agua hay que aprovecharla. El último escenario es una de las siete maravillas naturales del mundo: las cataratas de Iguazú. Esta maravilla natural, que visitan anualmente un millón y medio de personas, se ha convertido en un paraíso también para la energía renovable gracias a Iberdrola.
La multinacional española ha inaugurado la central hidroeléctrica de Baixo Iguaçu, aguas arriba de las famosas cataratas, con la premisa del respeto al medio ambiente como criterio fundamental. Esta nueva instalación ha supuesto una inversión de más de 500 millones de euros y suministrará energía limpia a un millón de brasileños, con una producción que equivaldrá a cerca del 8% de la demanda anual de electricidad del estado de Paraná, donde se ubica la planta.
La construcción de la hidroeléctrica de Baixo Iguaçu ayudará a regular los caudales de las cataratas de Iguazú
La central hidroeléctrica de Baixo Iguaçu se ha construido manteniendo los más altos estándares de calidad y respeto al medio ambiente, al igual que en el resto de instalaciones que tiene la compañía, minimizando al máximo el impacto que puede tener la construcción de una central de este tipo. Prácticamente no se ha modificado el cauce del agua, dado que de los 31 km2 del depósito de la central, más de 20 km2 pertenecen al propio río y, gracias a la utilización de tres turbinas tipo Kaplan, de las más eficientes del mercado, el área de inundación necesaria es sensiblemente menor que la de otras hidroeléctricas de tamaño similar.
Y no solo eso, sino que una de las aportaciones relevantes de la central es que podrá intervenir de forma determinante en la regulación de los caudales de las cataratas del Iguazú, los cuales se ven seriamente afectados en los periodos de sequía y llegaron a transformarse en 2006 en pequeños chorros de agua. Un dictamen del Operador Nacional del Sistema Eléctrico (ONS) ha concluido que, gracias a la aportación de esta instalación hidroeléctrica, las famosas cataratas contarán siempre con el caudal mínimo necesario.
Una central que cumple con el reglamento medioambiental
Tras la reciente inauguración, el presidente de Iberdrola, Ignacio Galán, ha destacado la implicación social y medioambiental del proyecto de Baixo Iguaçu: “Esta instalación supone un beneficio para las cataratas, ya que contribuirá al mantenimiento de un caudal mínimo necesario. Y a esto hay que sumar otras muchas iniciativas que han sido impulsadas en materia de salud, educación, infraestructuras y seguridad pública para preservar y fomentar el bienestar de la región”.
Pero la contribución ambiental va más allá: a través del Consorcio Empresarial Baixo Iguaçu (CEBI) se han llevado a cabo varios programas ambientales que monitorean, rescatan y preservan especies autóctonas en el entorno de la central. Adicionalmente, se ha construido un corredor verde para los animales.
Iberdrola impulsa las energías renovables fuera de la frontera española
A través de su filial Neoenergia, Iberdrola se ha convertido en una de las mayores eléctricas de Brasil por número de clientes, con 13,8 millones de puntos de suministro y una capacidad de producción en este país de más de 3.700 MW, de los cuales, casi el 86 % son renovables: tanto parques eólicos terrestres como centrales hidroeléctricas; una capacidad que alcanza los cerca de 5.000 MW si se suman los proyectos en construcción.
Iberdrola cuenta con el mayor complejo de bombeo hidroeléctrico de toda Europa, el de Cortes-La Muela (Valencia), en el río Júcar, con casi 1.400 MW. La compañía también está desarrollando en la actualidad el ambicioso proyecto Támega, en el norte de Portugal, complejo que contará con una potencia superior a los 1.100 megavatios, de los que 890 serán de bombeo. Proyecto tras proyecto para seguir reforzando el compromiso con una energía 100 % renovable y limpia.