Las mini maletas de Luis Negri o la armonía de lo exquisito
El artista se inspira en piezas de música clásica para dar vida a bolsos únicos que no entienden de modas ni de producciones a gran escala.
Artesanía, creatividad y constancia son términos íntimamente unidos que admiten en su ecuación otros muchos calificativos como la excelencia, la exquisitez o la durabilidad. Palabras en cualquier caso que hablan de dedicación y pasión por lo que uno hace y que definen a la perfección el minucioso y especial trabajo de Luis Negri.
De padres italianos, nacido en Alemania y criado en Argentina, se sintió desde niño seducido por la música del violín. Más tarde, sobre los 23 años, un hermano violinista fue la excusa perfecta para dejar sus estudios de Economía, volver a Alemania y empezar a desarrollar su faceta más creativa.
Con mucho trabajo, mucha picardía y mucha «inconsciencia juvenil» como él mismo nos cuenta, comenzó su historia elaborando a mano exquisitos estuches de violín.
Los estuches de violín de Luis Negri
«El primero se lo vendí a un chico que tenía un violín de medio millón de euros. Con el dinero que me dio hice dos más y me fui a Londres», explica. Allí se compró una máquina de coser usada y, de una forma totalmente analógica, empezó a llamar a puertas… y a hacerse un hueco entre los profesionales del sector.
Hamburgo, Lubeck o Berlín en Alemania y luego Suiza, Holanda… los contactos que le dio el violinista Daniel Hope y la calidad de sus estuches convencieron al mercado y comenzó a crecer. «Las grandes marcas habían dejado de hacer estuches de violín con piel exterior y eso me dio la oportunidad de diferenciarme», comenta.
A principios de los 2000 la marca Luis Negri hizo su primera incursión en Italia abriendo su primera tienda en Cremona. Allí nació y murió el famosísimo lutier Antonio Stradivarius cuyos valiosísimos violines (al menos cien) se protegen actualmente en estuches Luis Negri.
Llegada al mundo de la moda
Un viaje a Argentina, una crisis (la de 2008) y las circunstancias hicieron que el artesano se metiera, casi sin darse cuenta e inspirándose en los bolsos-caja de Louis Vuitton, en el mundo de la moda.
«Había hecho algo de maletería en el año 2000 pero no fue hasta 2011 cuando empecé a vender bolsos. Hice algunas maletas para botellas de vino especiales y las directoras de marketing las miraban como si fuera bolsos. De ahí surgió la idea del bolso-caja», recuerda.
Los bolsos de Luis Negri son, como él cuenta, maletines o maletas en miniatura. Sus precios parten de los 875 euros y dependen de la dificultad de su ejecución así como de lo extraordinario de sus materiales. Trabaja con cueros naturales y prioriza el armado artesanal con cerrajes de bronce macizo bañados en oro. Un bolso «sencillo» puede rondar las 35 horas de trabajo y uno complejo llegar a las 150 horas.
Comprar un bolso Luis Negri es un «intercambio emocional»
El artista dice que para su diseño se inspira normalmente en piezas de música clásica y que busca fundamentalmente que le gusten. «Hay un intercambio emocional entre alguien que compra mis bolsos y yo. La primera coincidencia está en que a alguien le guste algo que también me gusta a mí. Si en el momento de la compra hablamos de la inspiración o los motivos que me han llevado a ponerle plumas, remaches o flecos y ella lo aplica a su vida, la armonía con la clienta se hace de una manera natural«.
Así, Luis Negri valora mucho esa armonía y ese face to face que se vive en una tienda física y que sin embargo no cuajó del todo en España. «Estuvimos un año y medio abiertos en Ortega y Gasset pero teníamos más éxito con clientas extrajeras o españolas que venían a hacer turismo a Madrid que con las autóctonas.
La clienta que te ve todos los días o sabe que estás ahí «desprecia» lo cotidiano. Además, lo «hecho a mano» se valora de forma muy diferente según dónde nos encontremos. Mientras en Italia un artesano viene de Da Vinci, en España alude a un semi hippie que hace pulseras de hilo en la playa. Hay muy pocos sitios en el mundo donde se trabaje tan bien la piel como en Ubrique, por ejemplo, por lo que esa sensación debería cambiar«, sentencia.
Quizás por todo esto no esté entre sus proyectos volver a abrir tienda física en nuestro país. Según nos cuenta sus próximos pasos serán proyectos en México, Miami o quizás Italia, así como la creación de una línea masculina de bolsos que seguirá vendiendo, al igual que el resto de sus modelos, desde su tienda online.