Las Joyas que recibirá Carlos III en su segunda coronación
El hijo de Isabel II recibirá hoy en la catedral de Edimburgo los llamados Honores de Escocia, unas joyas especiales con un interesante pasado.
Hoy es un día importante para la familia real británica. Una nueva efeméride dedicada al rey de Inglaterra y a la que faltará, por supuesto, su hijo Harry. Se trata de la segunda coronación del hijo de Isabel II, un acto solemne que tendrá lugar en la catedral de Saint Giles de Edimburgo. Allí Carlos III recibirá los llamados Honores de Escocia, unas joyas con mucho significado que, al igual que sucediera con su entronización, también son clave en la segunda coronación.
Las joyas más antiguas de la Corona Británica
Los Honores de Escocia son las joyas de la Corona británica más antiguas de Reino Unido. Se exponen de manera habitual en la Sala de la Corona del Palacio de la capital escocesa y tienen un gran peso histórico.
Fabricadas con oro, plata y piedras preciosas las piezas son una corona, un cetro y una espada que también Isabel II recibió en la misma ceremonia en 1953.
Los tres Honores de Escocia
La corona en cuestión se hizo para James V, y la usó por primera vez en su coronación la reina María de Guisa, segunda esposa de su hijo, James IV, tras su fallecimiento. Es una pieza de oro con perlas rematada por una pequeña cruz sobre un pequeño orbe rematada por terciopelo rojo.
El cetro fue visto por primera vez en la coronación de María Estuardo, reina de Escocia desde los seis días y única hija legítima de su padre Jacobo IV. La pieza también pudo ser un regalo papal para su padre aunque no se sabe con exactitud.
En cuanto a la espada fue un regalo del Papa Julio II a Jaime IV y data de 1507. Su estado de conservación es muy delicado, por lo que el monarca recibirá una pieza similar pero no la original.
Historia de las joyas de la segunda coronación de Carlos III
También se usará en el rito la Piedra del Destino, una pieza histórica que hasta su robo por Eduardo I de Inglaterra, se usaba en las coronaciones de los reyes escoceses.
En cuanto a la historia de estas curiosas joyas clave en la segunda coronación de Carlos III, tienen un pasado turbulento. En tiempos del ejército de Oliver Cromwell las piezas fueron sacadas del castillo y escondidas para evitar su saqueo. Años después, en 1707, se guardaron en un cofre sellado tras el Acta de Unión de Escocia e Inglaterra.
En 1818, el famoso novelista Sir Walter Scott, redescubrió los Honores, junto con una misteriosa varita de plata.