La felicitación más especial para Isabel II y el duque de Edimburgo en su 73 aniversario de boda

Isabel II y el duque de Edimburgo se encuentran de nuevo confinados en el Castillo de Windsor. Aunque habían retomado cierta actividad pública tras el verano, el auge de la pandemia en Reino Unido y la adopción de drásticas medidas para controlarla les han obligado a recluirse de nuevo. Una situación que comparten con millones de familias para intentar bajar la curva de contagios. Seguro que tendrían otros planes para celebrar su 73 aniversario de boda en este 20 de noviembre, pero la pareja tendrá que pasar el día rodeada de un reducido séquito de asistentes.

El confinamiento sin embargo no ha impedido que la reina Isabel II y su marido reciban la felicitación de familiares, amigos y ciudadanos que han enviado a Windsor numerosas cartas. Entre todas ellas, la felicitación de sus bisnietos ha sido sin duda su preferida. Así lo han reflejado las redes sociales de la Familia Real británica en una tierna fotografía en la que se ve a la pareja observando la tarjeta que han elaborado los tres hijos de los duques de Cambridge.

 

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Isabel II y el duque de Edimburgo se casaron hace 73 años

La fotografía fue tomada a principios de semana por Chris Jackson, fotógrafo real de Getty Images en el Oak Room del Castillo de Windsor mientras Isabel II y el duque de Edimburgo revisaban una selección de felicitaciones. En la instantánea el duque sostiene la felicitación elaborada por el príncipe George, la princesa Charlotte y el príncipe Louis. Una tarjeta casera repleta de dibujos y colores que ha enternecido a ambos. En la portada de la misma se puede apreciar el enorme y colorido número 73 dibujado los pequeños.

Los tres hijos del príncipe William y Kate Middleton llevan varias semanas sin poder reunirse con sus bisabuelos. Una situación que es muy probable que se prolongue por un tiempo. Felipe de Edimburgo, que cumplió 99 años el pasado 10 de junio, luce un atuendo similar al de sus últimos actos públicos. La Reina, de 94 años, está como siempre. Inmaculada con un vestido de crepé de doble lana azul pálido de Stewart Parvin.

Luce en la solapa una joya con un significado especial. El mismo broche de crisantemo de zafiro y diamante engastada en platino, que usó durante las imágenes tomadas en su luna de miel en 1947. La Reina tenía solo 21 años cuando caminó por el pasillo de la Abadía de Westminster de la mano de su amado esposo, que entonces tenía 26 años.