Isabel Preysler, reina de la discreción también en los negocios
La reina de la prensa satinada mantiene un idilio desde hace años con varias marcas pero se desconoce el patrimonio real que atesora ni el volumen del mismo.
Isabel Preysler siempre ha destacado por su discreción. Algo que puede aprenderse a lo largo de la vida, pero que en su caso es una cualidad innata. Una forma de ser que también ha quedado reflejada en los negocios. Poco se sabe con certeza de sus inversiones, de sus propiedades y de la fortuna que atesora. Algo que aprecian también numerosas marcas, sobre todo las que han confiado en ella desde hace varias décadas. Cuentan los más cercanos a ella que hubo tiempos en los que rechazó cifras escandalosas para promocionar todo tipo de productos.
También afirman que Isabel Preysler nunca cederá su imagen a firmas o proyectos que no la convenzan. Que no le gusten. En la actualidad es imagen comercial de Porcelanosa (relación que se extiende desde 1985) y Pedro del Hierro. También colabora con la joyería Rabat y con la revista ¡Hola!. En el pasado tuvo contratos con Ferrero Rocher y Astor. Pero hoy por hoy, se desconoce en realidad cuánto patrimonio atesora. Salvo que siempre se ha dicho que ella tiene más dinero que los hombres con los que ha compartido su vida.
Isabel Preysler ha demostrado mucha cautela en sus incursiones empresariales
Pocos recuerdan sin embargo que Isabel Preysler también probó fortuna en el mundo de la televisión. La reina de las revistas del corazón debutó el 16 de mayo de 1998 como presentadora del magazine ‘Hoy en casa’ que se emitió en Telecinco.
El contrato en principio estaba estipulado para una duración de ocho programas, aunque sólo apareció en los seis primeros. Contaba con diferentes secciones de moda, decoración, salud o belleza.
Los negocios de Isabel Preysler
Precisamente atraída por el mundo de la estética, Isabel Preysler puso en marcha hace poco más de seis años uno de sus pocos negocios conocidos. Un proyecto de belleza facial bajo la marca My Cream, Isabel Preysler que su hija Ana gestiona personalmente. En su web se ofertan cremas anti-edad, contorno de ojos y sérums.
Su actividad en redes sociales es más bien escasa. En el registro mercantil figuran a su nombre varias sociedades con escaso patrimonio y sin actividad desde hace tiempo. Y en el registro de la propiedad sólo figura su vivienda particular. Una casa situada en una parcela de unos 5.000 metros cuadrados en el exclusivo barrio madrileño de Puerta de Hierro.