El vicio del poder nos descubre al mejor Christian Bale

Christian Bale interpreta a Dick Cheney en una película que desgrana los secretos de una persona que influyó irremediablemente en el desarrollo del orden mundial.

Amalia Enríquez. 10/01/2019

Hay vidas de personajes públicos que encierran historias que deben ser contadas para llegar a entenderlos mejor. ‘El vicio del poder’ es una visión entre bastidores y, al mismo tiempo, nada convencional del antiguo vicepresidente Dick Cheney y su sigiloso ascenso de becario del Congreso al hombre más poderoso del mundo.

Christian Bale, reciente Globo de Oro por esta interpretación, es el encargado de meterse completamente en la piel del reservado personaje principal, que cambió el mundo de forma que pocos líderes han podido hacer en los últimos 50 años. Le acompañan Steve Carell como el afable pero duro Donald Rumsfeld, Amy Adams como la ambiciosa mujer de Cheney, y Sam Rockwell como el maleable George W. Bush.

https://www.youtube.com/watch?v=-oMNUXYiu8U&t=2s

Sinopsis: La historia real de cómo Dick Cheney, un callado burócrata de Washington, acabó convirtiéndose en el hombre más poderoso del mundo. Fue como vicepresidente de los Estados Unidos durante el mandato de George W. Bush, con consecuencias en su país y en el resto del mundo que aún se dejan sentir hoy en día.

La compleja trayectoria de Cheney, que abarca medio siglo desde que era un trabajador eléctrico en la Wyoming rural hasta convertirse en presidente de facto de los Estados Unidos, ofrece una visión cargada de humor negro y a menudo perturbadora del uso y abuso del poder institucional. En las capaces manos de McKay, la dicotomía entre Cheney, el entregado padre de familia y el maestro titiritero de la política, se relata con intimidad, ingenio y audacia.

Christian Bale y Amy Adams son matrimonio en la ficción

Guiado por su indefectiblemente leal esposa, Lynne, y bajo la tutela del brusco y bravucón Donald Rumsfeld, Cheney se fue haciendo un hueco en la estructura de Washington D.C.. Empezando por la administración Nixon, se convirtió después en jefe de gabinete de la Casa Blanca con Gerald Ford y, tras cinco mandatos en el Congreso, Secretario de Defensa para George W. Bush.

En el año 2000 abandonó su cargo como consejero delegado de Halliburton para presentarse como vicepresidente de George W. Bush, con el entendimiento implícito de que ejercería un control casi sin cortapisas que lo convertiría prácticamente en copresidente. Las astutas y furtivas maniobras políticas de Cheney han cambiado el panorama político estadounidense, con repercusiones que seguirán haciéndose notar durante décadas. Pero está claro que hay más de un Dick Cheney, un hombre cuya reputación en el terreno público se contradice con su vida privada y su evidente devoción por su familia.

Relacionados

Últimas noticias

Subir arriba