¿Dejarías tu móvil encima de la mesa para que todo el mundo lo viera?

La verdad es que Álex de la Iglesia tiene la personal habilidad de materializar cinematográficamente nuestro día a día, por cruel que parezca, con altas dosis de sentido del humor. Esa visión tan peculiar ayuda a desengrasar, en muchos casos, el verdadero problema que nos ocupa. ‘Perfectos desconocidos’ es la prueba evidente del deterioro social que ocasiona el mundo 2.0 o la dependencia enfermiza del móvil. Para esta nueva aventura, el realizador vasco se ha rodeado de un reparto adictivo: Belén Rueda, Eduardo Noriega, Eduard Fernández, Ernesto Alterio, Juana Acosta, Dafne Fernández y Pepón Nieto.

Sinopsis: En una cena entre cuatro parejas de entre 45 y 50 años, que se conocen de toda la vida, se proponen un juego que pondrá sobre la mesa sus peores secretos: leer en voz alta los mensajes y las llamadas de sus móviles, su vida entera compartida por todos en ese momento… Para Álex de la Iglesia, su película “no es tan solo una comedia. Estamos tratando un auténtico problema social a través de un relato amable que ilustra de manera divertida la angustia que sufrimos los que vivimos atados al móvil”. El director habla de algo que le atañe personalmente y está convencido de que no es el único.

“La libertad de elegir con quién mantener una relación continuada ha desaparecido”, comenta. “Si antes vivíamos pendientes de 20 o 30 personas que nos importaban, ese número se ha ampliado exponencialmente”. Y muchas de esas “nuevas adquisiciones”, se cuelan en nuestras vidas sin pretenderlo y sin pedir permiso.

Todos los días nos comunicamos con gente de la que queremos saber poco o nada. Eso nos quita tiempo y libertad. “Las redes sociales nos obligan a tener nuestro timeline en constante actualización. Todo el mundo sabe lo que hace todo el mundo. Y no somos lo que pensamos, somos lo que subimos a la Red. El arma que nos ata en esta batalla eterna por preservar la intimidad, es el móvil. Se ha vuelto tan necesario como nuestros ojos o nuestra lengua. Si lo perdemos, no somos nadie. El miedo nos sobrecoge, porque el que posea nuestro móvil sabe más de nuestra vida que nosotros mismos”.

En ‘Perfectos desconocidos’, los personajes dejan sus móviles sobre la mesa como si de un juego se tratase “y no saben que, al hacerlo, se están desprendiendo de su alma, abandonándola a su suerte. El móvil refleja lo más profundo de nuestra identidad. Equívocos, confusiones, enredos que cuentan una verdad oculta. Espero que esta película sirva para que nos tomemos más en serio la importancia que tiene ese aparato diabólico, mientras nos reímos de algo que puede ocurrirnos en cualquier momento”, concluye Álex de la Iglesia.