Crystal Cruises, la reinvención del compromiso con la excelencia
Embarcamos en uno de los cruceros de la naviera que destaca por su trato al huésped y su exquisito servicio a bordo.
Cuando Antonio Lefebvre fundó Silversea en 1994 revolucionó el sector de los cruceros. Y cuando su hijo, Manfredi Lefebvre d’Ovidio, se hizo cargo de Silversea tras su fallecimiento en 2011, toda la industria supo que había llegado para quedarse. De este modo, Manfredi llevó a Silversea hasta la cumbre del sector del lujo. Luego Royal Caribbean compró la compañía tras adquirir dos tercios de las acciones en 2018, y él abandonó la naviera de lujo que levantó desde Mónaco y se lanzó a nuevas aventuras. Como la de Crystal Cruises.
Todo el sector de los cruceros es consciente de que Manfredi es de las personas que más sabe de cruceros de lujo. Le apasionan. Quizás por eso decidió adquirir el 85% del turoperador de viajes de lujo Abercrombie & Kent. Y quizás por eso también decidió reflotar Crystal Cruises, la naviera que se había llevado todos los premios a la naviera de lujo con mejor servicio a bordo. Ya sabemos que la pandemia hizo estragos, y Crystal fue una de las víctimas.
Así pues, Geoffrey JW Kent, fundador y presidente de Abercrombie & Kent anunció la creación de una sociedad estratégica junto al presidente del Grupo Heritage, Manfredi Lefvbre d’Ovidio. Todo con el fin de adquirir y potenciar la marca de viajes de lujo. Y ahí empezó el gran reto.
Una naviera con personalidad
Podríamos decir que se trata de una compañía muy boutique. No tiene detrás a grandes corporaciones y puede permitirse dedicarse a hacer lo que más sabe. Crear experiencias de lujo poniendo el foco en la absoluta excelencia de su servicio.
Pude embarcarme el pasado mes de julio por la Riviera francesa e italiana en uno de los dos barcos que tiene navegando, Crystal Serenity y Crystal Symphony. En este último -tienen bajo demanda otro barco- pude constatar la fidelización de sus huéspedes y la absoluta lealtad de su tripulación. Trabajadores que se sienten identificados con los valores que Crystal transmite en cada una de las experiencias que ofrece.
Un barco para disfrutar
El barco fue construido en su día para albergar a 1100 huéspedes. Pero Manfredi decidió remodelarlo ampliando las suites y fusionando cada dos de 20 m2 en una de 40 m2. De esta forma lo dejó solo para 600 pasajeros, lo que hace que el espacio a bordo por persona sea de casi el doble. Así como el ratio de tripulación por huésped, de prácticamente uno a uno.
Las suites, con cuidados detalles para hacerte sentir como en casa, cuentan con todos los elementos que cualquiera desea tener cuando se embarca. De hecho, muchos huéspedes describen la experiencia como “un destino en sí mismo”.
Las verandas y el amplio vestidor renovado se integran en un espacio que transmite sosiego, donde la confortabilidad y la habitabilidad son su esencia. La marca de fragancias siciliana Ortigia es quien firma las amenities en unas duchas de mármol con paneles de mando exteriores de dimensiones muy por encima de la media.
Gastronomía con estrella Michelin
Además, la exclusivas propuestas gastronómicas suceden en espacios de un diseño contemporáneo tranquilo, como los del resto de zonas de sus barcos. Estas pasan por la alianza con Nobu Matsuhisa, el reputado chef japonés que cuenta ya con alrededor de 50 establecimientos repartidos por las mejores capitales del mundo. Desde que se asociara con Robert de Niro en 1994 junto al productor de cine Meir Teper, tiene también una veintena de hoteles. El actor era cliente habitual de su pequeño restaurante japonés en el neoyorquino barrio Tribeca.
Así, Umi Uma by Matsuhisa es el primer restaurante Nobu a bordo de un barco. Allí su chef elabora unos pases con unos cortes de sashimi y nigiris imbatibles, junto a su famoso bacalao negro o el bogavante estilo Nobu con trufa negra y yuzu.
Experiencias culinarias para todos los gustos
No obstante, los huéspedes de Crystal Cruises tienen una oferta culinaria para todos los gustos, que pasa también por la propuesta italiana de la Osteria d’Ovidio, en homenaje al segundo apellido de Manfredi. Para ello han escogido a los hermanos Alajmo, anunciando hace poco su alianza junto al chef más joven en conseguir tres estrellas Michelin.
Así, Massimiliano Alajmo logró las tres estrellas para su restaurante familiar Le Calandre en Padua con 24 años y las ha seguido revalidando desde 2002. Ahora tiene otros diez restaurantes por toda Europa junto con sus dos hermanos.
Las opciones más desenfadas las podemos encontrar en Marketplace. Un lugar con un diseño acorde al estado de ánimo al que normalmente acudes a su zona interior o exterior, con una terraza diseñada en la popa con un gusto impecable. El Marketplace huele a brisa veraniega junto al mar.
Las opciones gastronómicas se completan con The Bistro, Waterside, The Vintage Room, Tastes Kitchen Bar, Trident Grill y un servicio de habitaciones las 24 horas del día.
Crystal Cruises y su servicio a bordo
Pero si hay un aspecto claramente diferencial de Crystal Cruises es el impecable servicio a bordo. Mayordomos formados en las mejores escuelas del mundo, camareros y cocteleros que disfrutan de su trabajo… Todos son conscientes de que, en Crystal, el huésped es el protagonista, con lo que el lujo silencioso llega a su máximo exponente aquí. Porque el lujo se encuentra en los pequeños detalles. El lujo se percibe y se siente, pero no lo ves. Está ahí de manera permanente sin estridencias. Así es Crystal.
Los itinerarios, ahora por el Mediterráneo acabando ya la temporada y después en Canadá y Nueva Inglaterra justo antes de empezar la temporada de Caribe y Asia, ofrecen también excursiones muy hechas a medida de cada huésped. Estas proporcionan al mismo tiempo una libertad absoluta para no vivir enconsertados con rígidos horarios.
Entretenimiento dentro y fuera del barco
Otro de los anuncios más recientes de la naviera es la alianza y colaboración con el Casino de Montecarlo, siendo el primer casino de Monte-Carlo Societé des Bains de Mer en el mar. En él los huéspedes podrán disfrutar de sus experiencias de entretenimientos en varios de sus itinerarios especiales en noviembre y diciembre, y de manera permanente cuando se inauguren los próximos barcos.
En una época en la que la demanda, en especial en el ámbito del turismo de lujo, está poniendo el foco en la vivencia de experiencias, Crystal Cruises ofrece un producto redondo. Sin duda será difícil que los que no suelen contemplar los cruceros entre sus primeras opciones puedan resistirse a embarcarse en un viaje hecho para todos los sentidos y sobre todo, en un claro homenaje al buen gusto.